El sueño de Iago Aspas de conquistar el mundo con España tocó a su fin este domingo, al menos de momento y, como mínimo, durante los próximos cuatro años. Una selección española que ha ofrecido una versión muy diferente a la que se esperaba durante el campeonato, y que ha llevado a la afición a señalar los nombres de varios futbolistas. No obstante, el de Moaña es de los pocos jugadores que se ha ganado el total respeto de la hinchada española tras lo acontecido en el Mundial.
Aspas se marcha de Rusia con la cabeza alta. Pese a haber errado su lanzamiento desde los once metros en la tanda de penaltis ante la anfitriona, los españoles han agradecido al celeste su compromiso y el empeño que ponía a cada jugada. No en vano, su gol ante Marruecos fue clave para conseguir el primer puesto en la fase de grupos.
El delantero del Celta, profundamente decepcionado consigo mismo ya que es un profesional que se exige sobremanera, ha querido sacar pecho tras la eliminación de la Roja: "En la vida y en el fútbol unas veces se gana y en otras se aprende... orgulloso de haber defendido este país y gran grupo humano", rezaba el mensaje de Aspas en Instagram.