Las ausencias de Maxi Gómez y Néstor Araújo van a impedir a Antonio Mohamed contar con dos de sus futbolistas más altos para enfrentarse al Deportivo Alaves. A estas ausencias se le une que Okay Yokuslu parte con escasas opciones de formar parte del once inicial. Por ello Mohamed deberá insistir en los centros laterales y el balón parado ante la falta de centímetros del Celta. Esta dificultad no impide que el técnico señale el duelo ante el Alavés como "una oportunidad para levantarse".
El entrenador tiene claro que "nos tenemos que ocupar de marcar más cerca y evitar las faltas innecesarias cerca del área", para minimizar las opciones de un Alavés que cuenta con jugadores como Laguardia, Pina o Bastón unida a la calidad de Ibai Gómez a balón parado.
Mohamed se mostró confiado de que el Celta pueda responder a las ausencias de estos jugadores ya que el equipo está mostrando un buen nivel defensivo en las acciones a balón parado: "Sabemos que en algún momento habrá pelota parada pero el equipo lo está haciendo bien en ese aspecto".
En lo personal, tras tener que trasladarse a Argentina por un "grave asunto familiar", el técnico reveló que se encuentra "con mucha energía". Por ello considera que este viernes ante el Alavés "es una oportunidad para levantar. Tenemos que jugar bien, tenemos que ganar", aseguró.
El técnico mandó un mensaje a un celtismo embargado por las dudas: "Tenemos que recuperar la confianza y tenemos que devolverle a la afición, con un triunfo, todo lo que no le pudimos dar en partidos anteriores".
"Extrañamos ganar y el grupo se debe un triunfo, una victoria. Mañana es el día. Inicia la jornada con nosotros, y sería bueno ganar para reubicarnos en la tabla y volver a orientar los objetivos a donde los pusimos a principio de temporada", indicó el técnico celeste, ya que con un triunfo el Celta se situaría, de forma provisional, en la séptima plaza, a un sólo punto del Alavés.