La polémica persigue a Ibán Salvador, el delantero internacional por Guinea Ecuatorial del Celta B, ha vuelto a ser el foco de atención del encuentro que disputó el filial celeste ante Unionistas de Salamanca. El punta, autor de dos goles este domingo, recibió un nuevo codazo en su cara, como ya ha sucedido en otros partidos y se le acusó de ser un provocador.
Con el 2-1 en el marcador y el partido en su máximo apogeo Ibán Salvador recibió el esférico y Garrido, autor del tanto de Unionistas, le propinó un claro codazo en la cara que hubiese supuesto la tarjeta roja y su expulsión. Un hecho que volvió a colocar al delantero celeste en el punto de mira tras las palabras del presidente del Rápido de Bouzas o el entrenador del Atlético B, que lo acusaban de comportarse de manera irrespetuosa con sus rivales, provocándolos a cada momento.
El jugador se tuvo que justificar y defender en Galicia en Goles tras la finalización del encuentro: "Es un pensamiento de ellos, hablan en caliente. El día que pasó lo de Las Palmas el entrenador habló en caliente porque no había visto ninguna imagen de lo que pasó", comentó.
"Hoy hubo otra agresión, dicen que no y es que no, ellos nunca tienen la culpa", continuó Salvador sobre el codazo de Garrido. El delantero aseguró que "voy a intentar conseguir las imágenes de la agresión, las voy a poner libremente en mis redes sociales, para que la gente sepa que en ningún momento busqué el contacto ni quiero ir a por el jugador", dijo el punta del Celta B.
Ibán Salvador continuó con su defensa en la Radio Galega: "Para que la gente sepa que en ningún momento busqué el contacto ni voy a por el jugador. Al revés, son ellos los que se calientan conmigo y son ellos los que me dan", confesó.
Para terminar, ante las distintas acusaciones en las que distintos rivales le han calificado como un maleducado, Salvador quiso dejar claro que "Educación es lo primero que me enseñaron mis padres. Si respetas, te respetan".