Para Xosé, miembro de London Celtas, el Celta de Vigo fue un amor a primera vista, este vigués de Lavadores, emigró con sus padres a Londres siendo un niño. El Celta, el equipo de su ciudad, sería un simple detalle en su vida si no fuese por un partido, un Celta-Ilicitano del 70. "Ahí me quedé, en el Celtiña para siempre", recordó este celtista de la diáspora.
"Siempre viví en Londres y hace ahora tres años se formó una peña, London Celtas", explicó Xosé a CeltaMedia. El veterano aficionado confesó que fue una de las integrantes más recientes de la colonia celeste en Londres la que propuso la creación de una peña.
"Si somos tantos celtistas en Londres, ¿por qué no nos juntamos para verlo?" fue el reto que propuso Iria, como recuerda Xosé. A partir de ahí el Celta se ha convertido en una religión para estos aficionados que no pueden estar en su tierra. Tal es la devoción por este momento que Xosé confiesa que "para llegar a la peña a veces tardo dos horas, tengo que cruzar todo Londres".
Antes del nacimiento de London Celtas, Xosé se las arreglaba para ver al Celta a través del ordenador: "Cuando llegó internet buscaba cómo ver el Celta, lo he visto en árabe, portugués, bulgaro..., con tal de ver el partido... el comentarista que diga lo que quiera".
Pero Xosé intenta estar siempre que puede en Balaídos, los derbis ante el Dépor eran una cita obligada, también uno de los primeros partidos de cada temporada: "Siempre vengo a los derbis, desde que puedo viajar solo creo que me he perdido tres, además en el verano casi siempre estoy aquí con el primer o segundo partido de Liga y ya puedo ver un partido antes de marchar, luego vengo tres o cuatro veces al año".
Pero donde Xosé ha podido disfrutar más con su Celtiña es por Europa: "Desde el aeropuerto de Londres es fácil viajar a cualquier lugar de Europa. Estuve en Milan, Marsella, Lens, Sttutgart, Turin, Genk, Atenas..." por lo que Xosé es testigo de grandes partidos que ya son historia eterna del Celta.
Por que Xosé tiene claro una cosa, "yo llevo al Celta en el corazón, a mí me da igual que no gane ni una taza", como dice la bufanda de London Celtas, "del Celta hasta que me muera"