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La tiranía de Mostovoi, el Madrid 'pentahumillado' en Balaídos

Mostovoi y Roberto Carlos (Foto: Eugenio Álvarez).
Alberto Bravo

Hubo una época en la que al Real Madrid le temblaban las piernas cada vez que tenía que llegar a Vigo para medirse al Celta en Balaídos. Panucci, Hierro, Sanchis, Roberto Carlos y compañía no eran capaces de frenar a un demonio llegado de la fría San Petersburgo, el Zar Mostovoi. Ese Celta logró ganar cinco partidos consecutivos a un Real Madrid lleno de estrellas, unas estrellas que salieron humilladas de Balaídos con 4-0 y un 5-1 aún recordados en Vigo.

De la temporada 1996/97 a la 2000/01 el Real Madrid solo conoció el amargor de la derrota, el recoger 16 balones en el fondo de sus redes para celebrar sólo dos míseros tantos. El conjunto merengue sabía que un medirse al Celta de Mostovoi era sinónimo de derrota. Cañizares, Bodo Illgner, Albano Bizzarri y Casillas tuvieron que sufrir en sus carnes la tiranía celeste comandada por su Zar, Alexander Mostovoi.

El primer  triunfo sirvió para certificar la salvación del Celta, un 4-0 con tres goles de Gudelj y otro de Sánchez ante un Madrid ya campeón de liga con Capello. La segunda victoria, en la temporada 1997/98 tuvo como protagonista absoluto a   , autor de los dos goles del Celta que vencía 2-1 al Madrid.

Sin duda el curso 1998/99 llegaba la gran humillación, el 5-1 con el que el Celta destrozaba al Real Madrid. Penev marcaba tres goles, Mostovoi y Mazinho los otros dos tantos ante el cuadro de Vicente del Bosque. Al ruso los jugadores del Madrid le cosían a patadas, le buscaban para insultarlo y sacarlo de sus casillas pero nada podía con un Celta superlativo.

Porque ese Celta aún logró ganar 1-0 y 3-0 las siguientes temporadas convirtiendo a Balaídos en un infierno en la tierra para el Real Madrid, un lustro de derrotas y humillaciones con el Zar como protagonista de cada una de estas tardes de gloria celeste que recordó El Día Después.

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