El Celta de Vigo ha decidido sancionar a Pione Sisto con una multa de 60.000 euros, la mayor cantidad con la que ha sido sancionado un jugador de la entidad celeste en toda la historia de la misma. Una decisión que castiga la 'escapada' del extremo danés a su país sin permiso del club durante la crisis del coronavirus, cuando su compañero Fedor Smolov, por ejemplo, si espero a tener el visto bueno para desplazarse a su Rusia natal.
De ello informa el programa 'Ao Contraataque' de la Radio Galega, que asegura que en la planta noble de Balaídos entienden que las acciones de Pione Sisto han devaluado de forma importante su precio en el mercado, lo que ha llevado al club a estudiar todas las opciones, incluso la de demandar al futbolista. Todo ello sin olvidar que el club le ha ofrecido en varias ocasiones su ayuda para resolver sus problemas de comportamiento, tal como señalaba el presidente, Carlos Mouriño.
"Pione Sisto tiene un problema y no está colaborando con el club para resolverlo pero es un problema del que nosotros no podemos hablar", dijo el máximo accionista del Celta en el directo que ha mantenido con la Federación Gallega de Fútbol. Unas declaraciones que siguen la línea de las palabras de Óscar García durante el pasado jueves, cuando reveló que "me gustaría poder estar entrenando con él pero por ahora no es posible".
Mientras tanto, Pione Sisto continúa ejercitándose en casa y no se le ha visto por A Madroa desde el lunes 11 de mayo, cuando el Celta retomaba los entrenamientos con la plantilla dividida en cinco grupos programados por el cuerpo técnico celeste. El extremo sigue mostrando un estado físico óptimo, mientras en el club no quieren hablar de su ausencia, aunque es un hecho que está motivada por su 'fuga' a Dinamarca.