El 6 de junio de 2009 es una fecha imposible de olvidar para el celtismo y para su ídolo, Iago Aspas. Hace justo once años el moañés debutaba en Balaídos en un partido con aroma de final ante el Deportivo Alavés. Los de Eusebio se jugaban, en esa jornada 40, un más que posible descenso a Segunda B con la consiguiente desaparición del club, incapaz de asumir sus numerosas deudas. Todos los factores estaban en contra para debutar ante tu afición, pero Aspas logró, en 14 minutos, su primera gran hazaña enfundado en la camiseta del Celta de Vigo.
El Celta llegaba a esa jornada 40 en el decimoctavo puesto de la tabla con 43 puntos, tres más que los que había logrado el Deportivo Alavés, el primer equipo que ocupaba los puestos de descenso. Una derrota en Balaídos ante el cuadro babazorro les hubiese dejado a expensas de un pinchazo del Alavés en las dos últimas jornadas de liga obligando a los vigueses a vencer a Sevilla Atlético y Xerez para meter presión al cuadro vitoriano.
Eusebio partía de inicio con Michu, Trashorras, Óscar Díaz y David Rodríguez como hombres más adelantados ante la ausencia de sus dos mejores goleadores, Dinei y Ghilas. En el banquillo estaba un imberbe Aspas esperando una oportunidad, la de debutar en su estadio.
Aspas lograba en 14 minutos dos goles con los que el Celta lograba la salvación de forma matemática en su debut en el estadio de Balaídos hace justo 10 años, fue el 6 de junio de 2009
La tensión marcaba el partido entre Celta y Alavés, Roberto Lago le robaba, por detrás y dentro del área, la pelota a Igor Martínez cuando estaba listo para ajusticiar a Falcón desde el punto de penalti. Falcón evitaba un centro de Edu Moya mandado el esférico a córner en otra clara ocasión para el Alavés.
Dani Abalo y Roberto Trashorras buscaban la réplica pero era de nuevo Falcón el que evitaba un clarísimo gol de Almirón tras un saque de falta lateral. Abalo cerraba la primera parte con un buen robo de balón que terminó estrellando en el lateral de la portería defendida por Bernardo.
Ya en la continuación Falcón volvía, por tercera vez, a salvar al Celta tras un disparo de Javi Guerra. El mismo Javi Guerra no llegaba a un centro desde el costado diestro de Calderón. El Alavés era muy superior a un Celta que buscaba sobrevivir en las cabalgadas de Dani Abalo.
Eusebio se la jugaba en el 59' dando entrada a Aspas por un inoperante Óscar Díaz. El moañés cambiaba el encuentro y gozaba de la primera ocasión en el 68, pero Bernardo le birlaba la pelota. En el 74' intentaba un remate raso al palo corto que Bernardo despejaba in extremis. Estas dos ocasiones avanzaban el epílogo final firmado por el propio Aspas.
Era el minuto 80, Trashorras abría el campo hacia el costado derecho, ahí recibía Abalo, el arousano no lo dudaba y centraba al corazón del área donde la cabeza de Aspas esperaba para poner el 1-0.
En una icónica imagen, Aspas corría al córner, se quitaba la camiseta y usaba un micrófono de ambiente para cantar su gol. Pero la agonía no cesaría ya que Juanjo marcaba en el 88' tras un centro de De Marcos. Falcón tenía que intervenir por cuarta vez para salvar, en este caso, un gol de De Marcos.
El partido estaba abocado al empate y el Celta tendría que seguir sufriendo dos jornadas más, pero en el 94' Aspas se aprovechaba de un rechace de Bernardo tras disparo de Jonathan Vila para poner el definitivo 2-1. Aspas, en su debut en Balaídos, salvaba al Celta con un doblete que hoy 6 de junio de 2019 cumple 10 años. Esa fue la primera gran hazaña de Aspas enfundado en la celeste