La plantilla del Celta de Vigo inició ayer lunes su segunda semana de entrenamientos, con una doble sesión en la que todavía no han participado el atacante Miguel Baeza, tercer refuerzo para el curso 2020/21, y el extremo turco Emre Mor, que ha regresado a Vigo para iniciar la pretemporada al no encontrar equipo. Los dos jugadores están a la espera de conocer los resultados de las PCR para poder entrenarse con sus compañeros, algo que estaba previsto que sucediese este pasado lunes, pero que no fue posible.
Tras los casos positivos por coronavirus de Santi Mina y Brais Méndez, aislados en sus casas para evitar que otros compañeros acaben con COVID-19. Emre Mor lleva una semana entrenándose en solitario en Barreiro y Miguel Baeza será presentado, en un acto sin asistentes, como nuevo jugador del Celta de Vigo.
El cuerpo técnico que lidera Óscar García Junyent ha programado cinco dobles sesiones para esta semana, en la que los futbolistas volverán a descansar el domingo y trabajarán únicamente de mañana el próximo miércoles.
Como suele ser habitual desde su llegada al banquillo de Balaídos, el balón ha sido el protagonista del entrenamiento matinal, en el que se vio al técnico catalán participando y corrigiendo la posición de sus futbolistas.
Óscar García sigue a la espera de que la dirección deportiva encuentre una salida a aquellos futbolistas con los que no cuenta, necesaria para que el club pueda abordar los nuevos refuerzos que ha demandado.