Promesas incumplidas, retrasos y sobrecostes: así está Balaídos seis años después de su presentación en sociedad

Este 28 de enero se cumplen seis años de la presentación en sociedad de la reforma del Estadio de Balaídos, cuando Concello de Vigo y Celta se encontraban en perfecta sintonía. Carlos Mouriño y Abel Caballero presentaban en el césped del vetusto coliseo una maqueta del 'nuevo' Balaídos acompañado de buena parte de la corporación municipal y de la directiva celeste. Una obra que iba a estar terminada a mediados de 2018, según aseguró ese día el alcalde, Abel Caballero.

Ahora finalizando enero de 2021 los dos antiguos fondos de Balaídos siguen en pie. Los retrasos se han convertido en norma habitual de esta reforma y los plazos se han incumplido de forma reiterada. Desde el Concello han asegurado que Marcador comenzará su derribo cuando se licite el contrato de la empresa que deberá llevar la seguridad de una obra con un presupuesto de más de 15 millones de euros. Una reforma que a día de hoy no tiene plazo de finalización y que costará a las arcas públicas una cantidad muy superior a los 25 millones de euros inicialmente presupuestados.

Ese día Abel Caballero aseguró que "en dos años y medio este estadio estará concluido, este mismo año (2015) más de la mitad del estadio estará concluido. Quiero agradecer al Celta, presidente y directiva, por la forma proactiva en la que enfocaron esto. En unos meses de fraguó todo. Esta gran remodelación hará historia en el Celta, Balaídos y la ciudad de Vigo, es una de las obras más importantes que se habrán hecho nunca en la historia de esta ciudad".

Seis años después no solo los plazos se han incumplido, la relación entre Celta y Concello de Vigo está totalmente rota. El enfrentamiento entre Carlos Mouriño, presidente y máximo accionista del Celta, y Abel Cabellero, alcalde de Vigo, es público llegándose a vivir momentos tensos y complicados con la amenaza latente de abandonar el estadio vigués y construir uno nuevo fuera el término municipal de Vigo.

Pero ese 28 de enero el regidor olívico aseguraba que "el Celta devuelve ciento por uno. Por cada euro que se invierte en este estadio, el Celta le devolverá a la ciudad cien y por tanto los millones que dedicamos a este estadio serán devueltos a la ciudad cien millones por cada millón" agradeciendo a Carlos Mouriño la implicación en una de las obras más importantes de la ciudad.

El último incidente, más allá de la paralización de las obras en un momento en el que otros clubes han aprovechado la ausencia de público en sus gradas por la pandemia provocada por el coronavirus, ha sido la inundación de los bajos de la Grada de Tribuna que ha causado unos desperfectos de miles de euros en material e instalaciones. Unas inundaciones que se seguirán repitiendo hasta que la Grada de Gol y la Rúa dos Olímpicos no se reforme, una obra que no tiene aún fecha de ejecución.