Medidas para evitar un brote mayor: antígenos, PCR, sin vestuarios y entrenamiento individual
El primer equipo del Celta de Vigo está citado este lunes 27 de diciembre en la ciudad deportiva Afouteza para retomar el trabajo para preparar los primeros compromisos del año 2022. Lo hace con muchas dudas provocadas por los cuatro positivos en coronavirus detectados en la plantilla en los últimos días y temiendo que este brote afecte a más jugadores. Las pruebas de antígenos y PCR que el protocolo de LaLiga exige realizar en la vuelta a los entrenamientos determinarán el número exacto de futbolistas contagiados ya que el Celta teme que el brote alcance a una parte importante de la primera plantilla. Este lunes a las 16.00 horas determinará el alcance exacto de un brote que puede trastocar los planes de cara a los primeros duelos del año ante Real Betis, Atlético Baleares y Real Sociedad.
Tras ser detectados los positivos de los cuatro jugadores contagiados el club se puso en contacto con el resto de la plantilla, jugadores de las categorías inferiores que trabajan bajo las órdenes de Eduardo Coudet y su cuerpo técnico más los empleados que comparten el día a día con todos ellos. El Celta facilitó test de autodiagnóstico a todos ellos para que se controlasen durante los días de vacaciones. Además les pidió que extremasen las precauciones para no contagiarse.
En este regreso al trabajo programado para esta tarde solo podrán acceder a las instalaciones los jugadores que hayan dado negativo en una prueba de antígenos que les realizarán previamente. Tampoco podrán usar los vestuarios de la ciudad deportiva ni entrenarse con el resto de sus compañeros. LaLiga ha determinado que para evitar un brote en el regreso de vacaciones no se utilicen las instalaciones de Afouteza y que los jugadores se entrenen de forma individual.
A mayores de la prueba de antígenos los jugadores deberán realizarse una prueba PCR de la que sabrán sus resultados a última hora del lunes o primera hora del martes. Este procedimiento es más fiable que los test de antígenos y con el se quiere evitar que se contagien más jugadores ya que los nuevos casos detectados sí que podrían diezmar al Celta para los próximos encuentros de Liga y Copa.
Los cuatro primeros positivos, en el caso de dar negativo en la PCR exigida por las autoridades sanitarias, podrían abandonar el confinamiento obligatorio de diez días exigido por la Xunta de Galicia. Llegarían, sin entrenarse con el resto del equipo, al partido del 2 de enero ante el Real Betis en el Benito Villamarín ya que el 1 de enero se terminaría su cuarentena. Estos jugadores, de los que el Celta pidió no difundir su nombre amparado en la ley de protección de datos y de privacidad del paciente, se podrían subir al avión y formar parte de la convocatoria si así lo determina Eduardo Coudet.
Todos los positivos que hayan sido detectados con posterioridad deberán guardar la cuarenta obligatoria de diez días. Se perderían los duelos del 2 de enero ante el Real Betis y del 5 de enero ante el Atlético de Baleares, correspondiente a los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, y podrían llegar al partido del próximo 8 de enero ante la Real Sociedad. Además, para estos primeros duelos, el cuerpo técnico sabe que no podrá contar con Kevin Vázquez y Thiago Galhardo mientras que Augusto Solari aún no está descartado. Los tres jugadores lesionados se han estado entrenando en Afouteza durante las vacaciones navideñas para apurar los plazos de su recuperación.