El Celta de Vigo perdió en su visita al Metropolitano ante un Atlético de Madrid que se aprovechó de los errores de Hugo Mallo, Dituro y Javi Galán en los dos goles anotados por Renan Lodi. A peasr del 2-0 no fueron inferiores los vigueses durante muchos tramos del encuentro pero pagaron muy caro sus fallos atrás y su falta de contundencia en ataque. El cuadro dirigido por Eduardo Coudet, tras el segundo gol colchonero, no fue capaz de dar un paso al frente. Se sintió inferior a un rival que sacaba a cinco jugadores de primer nivel desde el banquillo para cerrar el partido. Con esta derrota los vigueses se quedan en mitad de tabla, virtualemente salvados pero muy lejos de la sexta plaza, que da acceso a jugar competiciones europeas.
Los dos contendientes, como si de púgiles se tratase, medían sus fuerzas en una báscula en la que la posesión se repartía a partes iguales en un tramo inicial en el que los golpes, dos remates por bando, también eran parejos. El respeto que se profesan Coudet y Simeone se trasladó al césped. El Atlético buscaba presionar más arriba pero era el Celta quien golpeaba con fuerza. Primero Santi Mina le arrancaba una amarilla a Savic tras un gran robo en mediocampo y después era Franco Cervi el que rozaba el gol con un ajustado disparo a pase de Denis Suárez que lograba tapar Reinildo cuando Oblak estaba lejos de poder atajar el disparo del volante izquierdo.
Con un Celta que no se amilanaba ante un rival tan potente al celtismo le costó contener la respiración cuando los tacos de Giménez se plantaron sobre el tobillo de Aspas. Visiblemente dolorido, con la media sacada y el pie del moañés marcado por la acción de central uruguayo, se temió lo peor. No tenía buena pinta lo que se veía en las imágenes y el castigo era menor para el Atlético, una simple cartulina amarilla. Cuando parecía que el delantero del Celta, también amonestado por protestar, no iba a poder seguir apretó los dientes y apostó por continuar sobre el césped del Metropolitano.
Pudo respirar Coudet, sus compañeros en el banquillo y toda la afición del Celta. Los dos centrales colchoneros debían afrontar casi todo el partido con amarilla ante un tridente que les seguía buscando las espaldas cada vez que se acercaban a la zona de tres cuartos colchonera. El Atlético de Madrid, consciente de su discreto arranque, ponía un punto más de intensidad en la salida de balón de un Celta que estaba empezando a notar el aliento de los de Simeone. Minuto a minuto el encuentro alcanzaba la primera media hora con el conjunto madrileño mandando sobre el campo.
Un error de Hugo Mallo, que se quedó clavado habilitando a Renan Lodi, permitió al lateral brasileño controlar el balón cuando el resto de la defensa celeste había tirado bien el fuera de juego. Lodi se aprovechó del error del capitán y lo dejó en evidencia con un recorte con el que se deshizo de él. Su remate al palo corto también era parable si Matías Dituro hubiese tapado bien su portería. El Celta, tras muchos y muy buenos minutos, veía como el marcador le era desfavorable desde el minuto 36. Coudet, que pedía calma y tranquilidad a los suyos, apostaba por que el Celta no variase su manera de jugar.
Los vigueses dieron un paso al frente tras el gol. Volvieron a manejar el esférico y rondar el área de Oblak. Con un disparo por encima del larguero de Javi Galán se cerraba una primera parte igualada en la que un doble error de Mallo y de Dituro, que se come el balón en su primer palo, permitieron al Atlético de Madrid irse con ventaja al descanso. Conscientes de no haber sido inferiores a los de Simeone los celestes salieron con buen ánimo a la segunda parte. Primero Santi Mina, a centro de Brais, y después Aidoo rozaron el empate. El central no logró rematar en el segundo palo molestado por Vrsaljko en un buen arranque del Celta.
Como en el primer acto el Atlético de Madrid se fue sacudiendo el dominio vigués para acabar marcando el segundo. De nuevo Lodi anotaba en una jugada en la que Mallo y, sobre todo Galán, habilitaban su posición a pase de Kondogbia. El capitán le dejaba muchos metros de ventaja al brasileño y el lateral zurdo tiraba mal la línea de fuera de juego. El Atlético se ponía con 2-0 en el 60' con dos claros errores de los celestes. Este segundo gol hizo daño a un Celta que no encajó el tercero gracias a una bonita intervención de Dituro a disparo de De Paul. Coudet no cambiaba sus piezas a pesar del resultado. Aguantaba con los mismos once jugadores hasta el minuto 74, cuando entraron Thiago Galhardo y Nolito. También lo hizo Solari poco después pero el partido estaba sentenciado a favor de los de Simeone. Buscó el tanto del honor el Celta en un más que aceptable final de partido pero se quedaron sin ese premio menor.
El Celta se queda con 32 puntos en 26 partidos en mitad de tabla. A falta de los partidos que tienen que disputar Athletic Club, Villarreal y Real Sociedad, Europa está a seis o siete puntos (dependiendo del campeón de Copa del Rey), una diferencia que aún no es insalvable pero que jornada a jornada se va acrecentando. El descenso, a once puntos, no es un problema para un Celta que tiene por delante doce partidos para acabar lo más arriba posible y no cerrar en marzo la temporada.
¿Soy yo el único que piensa que Hugo Mallo hace mucho tiempo que no está al nivel de ser titular en primera división?, gracias.