Celta Fortuna: Gaizka Campos; Javi Castro, Álex Martín, Carlos Domínguez, Diego Pampín: Àlex Carbonell (min. 45, Miguel Rodríguez), Jordan Holsgrove, Cedric (min. 63, Losada), Alfon (min. 63, Javi Gómez); Gabri Veiga (min. 78, Beitia) y Lautaro de León (min. 63, Fabrício).
CD Calahorra: Iricibar; Cera (min. 89, Zubiri), Cristian Fernández, Gómez, Zabaleta (min. 89, Torras); Tarsi Aguado, Jesús Álvarez, Carlos Vicente, Ismael Barace, Arias (min. 59, Madrazo) y Soto (min. 78, Zoilo).
Sergio Pérez Muley (Comité Madrileño).
Amonestó a Carbonell y Álex Martín del Celta B. Por parte del CD Calahorra vieron amarilla Jesús Álvarez y Cristian Fernández.
Partido correspondiente a la jornada 33 de la 1º RFEF. Disputado en el estadio Barreiro ante 900 espectadores.
El Celta B empató a dos goles ante el Calahorra en un igualado encuentro en el que los de Onésimo desaprovecharon una gran oportunidad de dejar fuera de la lucha por el playoff de ascenso al cuadro calagurritano. Los celestes sufrieron con las rapidas transiciones de un Calahorra guiado por Carlos Vicente. Así llegó el 0-1 que noqueó a un equipo que resurgió de la mano de Gabri Veiga. Con tablas en el marcador llegó un descanso que Onésimo aprovechó para introducir a Miguel Rodríguez. El redondelano logró poner por delante al Celta B pero poco le duró la alegría a un filial que vio como Cristian Fernández ponía el 2-2 en el marcador tras un error de Gaizka Campos. Con todo el ataque remozado por Onésimo el filial se desnortó por completo. Solo en los últimos minutos, más por garra que por juego, volvió a acercarse a la meta riojana. No fue suficiente para sumar los tres puntos en una complicada tarde en Barreiro que obliga a los vigueses a seguir peleando por clasificarse para la lucha por el ascenso a LaLiga SmartBank.
Arrancaban los de Onésimo con varias modificaciones en el once. Miguel Rodríguez, tras varios encuentros lejos de su nivel, se sentaba en el banquillo para dar entrada a Lautaro de León. Cedric reforzaba la banda derecha y Carlos Domínguez, sin partido con el primer equipo, era de la partida en el eje de la zaga desplazando a Javi Castro al lateral diestro. El Calahorra, con el Álex Arias disfrutando de la primera oportunidad en Barreiro, proponía un encuentro de pelea y contacto. El Celta quería tener la pelota en el piso, dominar la posesión y obligar al cuadro riojano a desgastarse corriendo detrás del esférico. Así llegó, en el minuto 10, la primera de los de Onésimo. Un taconazo de Holsgrove, a la media vuelta, habilitaba a Gabri Veiga. El porriñés se encontraba con un acertado Iricibar para evitar el 1-0.
El Calahorra, en una trabajada transición, golpeaba por medio de su gran estrella. Carlos Vicente. El extremo de 23 años batía por bajo a Gaizka Campos tras recibir un preciso pase de Barace desde banda izquierda. Javi Castro, muy blando, fallaba en la acción permitiendo ese centro que terminaría en el 0-1 cuando el reloj se acercaba al minuto 15. El gol calagurritano hacía mucho daño a un filial que se alejaba, con el paso de los minutos, de la meta de Iricibar. Sufría el Celta con las transiciones del Calahorra. Carlos Vicente encontraba la espalda de un inseguro Carlos Domínguez. El vigués tenía que rectificar para evitar el segundo gol visitante. Soto, Arias y Barace llegaban con peligro al área celeste.
Solo Gabri Veiga, con sus conducciones en carrera, presentaba una mínima oposición. El porriñés peleaba contra toda la zaga rival y ganaba. Veiga, pasada la media hora del partido, era capaz de espolear a sus compañeros. La respuesta celeste llegaba con un testarazo de Lauti que se marchaba rozando el palo izquierdo del Calahorra tras centro de Castro. No lo tuvo que lamentar el filial porque en el 37' los mismos protagonistas, aunque cambiando el orden de aparición, lograban el tanto del empata.
Javi Castro conectaba con Lauti, este descargaba sobre Veiga y el porriñés, con un ajustado remate a la cepa del poste superaba a Iricibar. El gol despertaba a un filial que protagonizaba los mejores minutos del partido antes de llegar al descanso. Alfon, Cedric y, sobre todo, Lauti pudieron poner el 2-1. El delantero tuvo un uno contra uno que no pudo resolver de primeras. Intentó arreglarlo con un par de recortes buscando un espacio para rematar, finalmente, muy forzado.
Con tablas y, con Miguel Rodríguez en el campo por Carbonell, arrancaba un segunda mitad en la que el redondelano tenía la primera. El Calahorra, de nuevo guiado por Carlos Vicente, replicaba el guion de la primera mitad. Los riojanos dejaban la pelota al filial y se lanzaban a la contra con su habilidad para transicionar. Volvía a titubear el cuadro celeste cada vez que Carlos Vicente tenía la pelota. Las dudas atrás se tornaban en certezas arriba. Miguel Rodríguez y Gabri Veiga enseñaban los colmillos con sendos remates.
El juvenil acababa dándole la vuelta al resultado al empujar al fondo de las mallas un pase atrás de Alfon. El manchego, muy desacertado todo el encuentro, por fin superaba a Cera para regalar el 2-1 a Miguel. Sin tiempo a disfrutar del gol llegó el empate del Calahorra. Un error de Gaizka Campos en un balón parado permitía el tanto de Cristian Fernández. Media hora por delante tenía el Celta B para volver a marcar, un gol que casi marcó el Calahorra en un centro al área muy mal defendido por la zaga viguesa. Barace ponía la pelota en la cabeza de Cristian Fernández. El testarazo del capitán calagurritano se iba lamiendo el palo de Gaizka Campos.
Onésimo, muy enfadado por la endeblez de su equipo, daba entrada a Beitia por Gabri Veiga. Anteriormente habían entrado al campo Íker Losada, Fabrício y Javi Gómez. El técnico había cambiado todo su ataque provocando que el equipo se desconectase. Solo las carreras de Fabrício, de nuevo muy inocente de cara al gol, daban cierto aire a un filial muy perdido en Barreiro. Gaizka Campos se redimía de su error con dos buenas intervenciones que permitían que el filial llegase con vida a los últimos minutos. Un disparo de Holsgrove, otro de Miguel Rodríguez rechazado por un defensa y altísimo remate de Beitia desde la frontal eran las últimas acciones de un Celta B que perdía en Barreiro una oportunidad de oro de dejar fuera de la lucha por el playoff de ascenso al Calahorra.