Rubén Blanco ha ampliado su contrato hasta junio de 2027. El guardameta criado en las categorías inferiores del Celta de Vigo renovó su vinculación con el club vigués por cinco temporadas. Ahora se abre un periodo de reflexión. Rubén Blanco podría salir cedido al Girona para disfrutar de los minutos que no ha tenido la pasada temporada bajo las órdenes de Eduardo Coudet. Independientemente de esa posible cesión el canterano ha confesado que "cada vez que vengo a renovar mi contrato es un día que queda marcado para mí". Especialmente en esta etapa en la que el club afrontará el centenario. "Vienen años muy bonitos, tenemos que afrontarlos con ilusión y optimismo".
Tras renovar su contrato hasta junio de 2027 el portero fue entrevistado por los medios del club: "Estoy muy contento. Esta es mi casa, me siento muy cómodo y cada vez que vengo a A Sede a renovar mi contrato es un día que queda marcado para mí. Es un bonito recuerdo, hoy es un día muy feliz para mí.
"Llevó desde el infantil B en el club. Son ya nueve años en el primer equipo y siempre lo he dicho, mientras el club no me diga lo contrario estaré encantado de estar aquí". "Es un orgullo para cualquier niño llegar al primer equipo. No podemos decir otra palabra que orgullo para los que crecimos aquí, el poder competir con el Celta al máximo nivel", confesó mientras recordaba su debut con el primer equipo en un momento crítico ante el Real Vallladolid y Espanyol en el que el equipo logró una agónica salvación.
Rubén Blanco destacó que "vienen años muy bonitos para el club y también para la ciudad y creo que tenemos que afrontarlos con ilusión y optimismo" ya que en la temporada 2023/24 se celebrará el centenario del club. Una temporada en la que el mosense espera estar en la plantilla peleando por un puesto de titular si finalmente este curso acaba marchándose cedido.