La continuidad de Tapia, en el aire: pros y contras de quedarse o salir del Celta

Renato Tapia ha entrado en último año de contrato. El internacional peruano cumple su cuarta temporada en Vigo tras llegar procedente del Feyenoord en 2019. Por delante se le presenta un futuro lleno de incógnitas. El club está dispuesto a traspasarlo en este mercado de fichajes. Varios clubes se han interesado por el pivote, que de nuevo afronta la temporada con un rol secundario en el equipo, sin que nada haya avanzado. Todo hace indicar que en A Sede no están interesados en renovar su contrato. La venta es una opción apetecible para el club. Renato Tapia no ha dicho que no a salir este verano pero hay varios factores que le están haciendo dudar.

Hasta el momento el Olympique de Lyon, que sigue detrás del peruano tras solventar sus problemas con el límite salarial, y el Girona han sido los clubes más interesados en Renato Tapia. El cuadro catalán necesita un pivote tras traspasar a Oriol Romeu por cinco millones de euros al FC Barcelona. Esa es la cantidad que habría ofrecido el Olympique de Lyon por el centrocampista celeste. Pero la Direction Nationale du Contrôle de Gestión, ha impedido que el cuadro lionés pueda firmar al internacional peruano hasta que no reduzca su masa salarial.

Cuando todo parecía cerrado ese problema dilató el proceso de firma. Ahora Renato Tapia duda si aceptar esa o alguna de las ofertas que tiene encima de la mesa. Aspectos personales, con su familia asentada en Vigo, y profesionales hacen que el centrocampista aún no haya decidido qué hacer con su carrera deportiva. Con 28 años por delante aún tiene muchos años para seguir jugando en la élite. Precisamente la opción de continuar una temporada en el Celta y salir con la carta de libertad el próximo mes de junio no está ni mucho menos descartada por el futbolista.

Renato Tapia, tras tres años en Vigo, está cerca de lograr la nacionalidad española. Tras no conseguir la neerlandesa sellar la española le convertiría en una pieza mucho más atractiva en el mercado. Con pasaporte comunitario podría encajar en la planificación deportiva de muchos más clubes. Irse de España en estos momentos podría provocar, como le sucedió en Países Bajos, la paralización de su expediente de nacionalización.

Además el futbolista, en caso de abandonar el Celta con la carta de libertad, podría aspirar a un mejor contrato. El club que lo escoja el verano de 2024 puede afrontar un mayor salario, incluida una prima de fichaje, al no tener que pagar un traspaso al Celta de Vigo. Así lo logró Jonathan Bamba este mismo mercado de fichajes al no querer renovar su contrato con el Lille y decantarse por el Celta. Los aspectos económicos, profesionales y familiares hacen que el futuro de Renato Tapia no esté claro. El Celta está contento con su rendimiento pero saben que su rol seguirá siendo el de sustituto de Fran Beltrán.