Ofensiva total del Nápoles por Gabri Veiga: el jugador dio el sí; el Celta, aún no

El Nápoles quiere a Gabri Veiga en el Calcio. El jugador ya ha llegado a un acuerdo con el campeón italiano. Falta lo más importante, el acuerdo entre clubes. Aurelio de Laurentiis, presidente del conjunto napolitano, quiere al canterano celeste y busca fórmulas para lograr su fichaje. En A Sede, con la palabra de Carlos Mouriño en juego, se siguen remitiendo a la cláusula de rescisión. Los 40 millones de euros son, en estos momentos, una cifra a la que no ha llegado el Nápoles. En una negociación pública, en la que cada medio trasalpino apunta nuevas informaciones, se avanza una oferta de 32 millones de euros más 4 en variables. Hay otras opciones para firmar el traspaso, el Nápoles las explora todas.

Gabri Veiga, que en Vigo tiene un salario que apenas supera los 300.000 euros brutos por temporada, recibiría en Nápoles 2,2 millones de euros netos en cada una de las cinco temporadas que firmaría. Sería jugador napolitano hasta junio de 2028. El canterano ya ha dicho, como se avanzó en Italia, sí a esta propuesta en que que multiplica por diez su ficha. El Celta, como había asegurado Carlos Mouriño en marzo o Juan Carlos Calero en las últimas semanas, no quiere vender al jugador pero "nos lo van a comprar". Ambos afirmaron que no saldría por menos del valor de su cláusula de rescisión, de 40 millones de euros.

El Nápoles ya está muy cerca de esa cantidad pero no ha llegado a ella. Incluir un porcentaje de una futura venta, aumentar la cifra de variables o que un jugador termine entrando en la operación de compra son las opciones que se plantea Aurelio de Laurentiis. Nombres como Gianluca Gaetano, Diego Demme, Michael Folorunsho, Alesio Zerbin o la opción de comprar a Walid Cheddira al Bari para cederlo al Celta de Vigo. En Vigo podrían plantearse no cobrar los 40 millones de euros en dinero pero sí llegar a un acuerdo por el valor de esa cantidad con la inclusión de algún futbolista que pueda cubrir las carencias de la plantilla viguesa.

El Celta rechazó inmediatamente la oferta de 30 millones de euros por Gabri Veiga procedente del Nápoles. El campeón italiano aumentó la cantidad hasta los 32 o 33 con otros cuatro millones en variables. Las diferencias son mínimas en estos momentos por lo que todo indica que si ninguna de las dos partes termina rompiendo la baraja se llegará a un acuerdo. En A Sede no quieren que este se produzca en los últimos días del mercado. Reforzarse en horas con muchos millones en caja produciría una inflación exagerada en cualquier operación que se termine de concretar. En Vigo están dispuestos a quedarse con Gabri Veiga porque "sería la guinda del Centenario" pero los 40 millones o una venta por su valor también se ve con buenos ojos.

Con este dinero el club podría cerrar un centrocampista y un delantero de nivel para completar la plantilla. A pesar de que la venta de Gabri Veiga no elevaría de manera notable el límite salarial sí permitiría al Celta firmar dos buenos jugadores en ambas posiciones. Con esto, más la llegada de un portero que ya está prácticamente cerrado, Rafa Benítez contaría con un plantilla con las posiciones dobladas. En A Sede siguen trabajando en las salidas de Sergio Carreira, José Fontán y Miguel Baeza. En caso de no poder dar salida a Fontán podrían ceder a Carlos Domínguez para que se foguee en Segunda División quedándose el de Vilagarcía como cuarto central y posible lateral izquierdo suplente con Cervi. Además el Celta no tendría problemas en facilitar la marcha de Gonçalo Paciencia y Agustín Marchesín.