Yoel Lago, Gael Alonso, Dela y Raúl Blanco, lágrimas de desconsuelo sobre el césped

Se acabó la temporada para el Celta Fortuna. Los jóvenes futbolistas del filial vigués cierran un gran curso con una durísima derrota en los últimos minutos de duelo disputado ante el Málaga en La Rosaleda. Los pupilos de Fredi Álvarez tuvieron al alcance de su mano el pase a la final. Solo dos errores propios lo impidieron. Tras el pitido final todo eran lágrimas y desconsuelo al tener que despertarse de la manera más dramática del sueño del ascenso.

Con lágrimas en los ojos se llevaba Yoel Lago la camiseta sobre su cara. El joven central, que esta temporada alcanzaba el primer equipo, se lamentaba de su error en el 87'. Mientras tanto Javi Rueda se iba con rabia por el colegiado y su asistente protestando el agarrón con el que el preparador físico del Málaga le impidió sacar de banda en el descuento.

Pablo Durán miraba al cielo mientras que Dela yacía sobre el césped absolutamente superado por la eliminación. Era Miguel Román quien lo levantaba para fundirse con él en un abrazo. Javi Rodríguez hacía lo mismo con Yoel Lago.

El cuerpo técnico del Fortuna arropaba a Dela, devastado. También se acercaban jugadores del Málaga para animarlo. Completamente solo, Gael Alonso lloraba mientras se enjugaba las lágrimas con su camiseta.

Raúl Blanco, con la cabeza baja, era animado por su rival este sábado, el lateral Víctor García. También lo hacía Einar Galilea. Ambos iban también a ofrecer consuelo a Gael Alonso. Completamente agotados y abatidos se iban a suelo todos ellos. Unas lágrimas que en pocos días se convertirán en orgullo por todo lo logrado.

Ya en el túnel de vestuarios Joel López, que tuvo que pedir el cambio al comienzo de la segunda mitad por lesión, abandonó el estadio de la Rosaleda en muletas. El defensa no podrá disfrutar de las vacaciones hasta que los servicios médicos del Celta evalúen el daño en su rodilla izquierda.