Brais Méndez y la Real Sociedad en conjunto ejecutaron un partido sobresaliente en Salzburgo para cosechar la primera victoria del año en la Champions. El Red Bull Arena se rindió al juego de los de Imanol Alguacil, el cual enamora allá por donde va. Uno de los momentos más destacados fue el golazo del atacante txuri urdin, que supuso el 0-2 de los suyos.
Brais inició un contragolpe desde su propio campo, condujo el esférico hasta el área rival y le pegó cruzado para superar al portero y anotar una auténtica obra de arte. Fueron muchos los reconocimientos que recibió por el golazo, pero Brais centró el foco en los dos compañeros que le acompañaron en la jugada.
Tras el partido, explicó la importancia de Kubo y Oyarzabal en la jugada, los cuales le acompañaron y le fueron abriendo camino. "Es mérito de ellos, los dos van hablándome y diciéndome dónde están los defensores. Así es más sencillo. Nos entendemos todos muy bien, la unión que hay fuera del vestuario y del campo se nota dentro", explicó en declaraciones a Movistar.
Un gol de bandera que fue la guinda del pastel de una tarde redonda, que permite a la Real auparse a la zona alta del grupo con cuatro puntos.