Tras 20 años sin ver la Liga de Campeones en St. James' Park, el Newcastle United del dinero saudí se presentó a lo grande este miércoles en Europa con una goleada ante el París Saint Germain (4-1), que vuelve a decepcionar en una gran noche en el Viejo Continente.
Y curiosamente, en este Newcastle patrocinado por Arabia Saudí, dos de los tres goles los pusieron hombres de la casa, Dan Burn y Sean Longstaff, -'Geordies' como se conoce a los habitantes de la región-, y ayudados por un Miguel Almirón que abrió el marcador y el camino para la primera victoria europea de las 'Urracas' en tres años.
Fue una exhibición del Newcastle, que dejó mucho que desear ante el Milan en la primera jornada, en una noche que salvó Nick Pope, pero mejoró mucho arropado por su estadio y ante un PSG que sigue siendo incapaz de motivarse en estos partidos.
Los de Luis Enrique, además, comenzaron con un tiro en el pie. Después de que Dembelé empalase una volea rozando el palo y metiera miedo a los 'Magpies', Marquinhos se encargó de despejar la tensión de St. James' Park con un error impropio de un jugador de su experiencia.
Intentó sacar el balón entre varios jugadores y no le dio suficiente altura. Cazó el fallo Brumo Guimaraes, que se la dejó a Isak en el punto de penalti para que la volea del sueco la sacara a quemarropa Donnaruma. El rechace le cayó a Almirón y lo encajó a la perfección en el ángulo.
Rugió el templo del Newcastle, encantado con esta nueva versión vitaminada de un equipo que hace no tanto peleaba por no descender, y el 2-0 lo rozó Fabian Schar con una jugada ensayada que le dejó disparar a placer desde dentro del área.
Se salvaron los parisinos, que echaron mucho de menso a un desaparecido Kylian Mbappé, pero solo una vez. En una jugada rocambolesca, Donnaruma salvó un remate raso sin ángulo de Guimaraes, pero la defensa francesa no despejó el balón. Tonali se lo devolvió al brasileño y esta vez optó por levantar la cabeza y buscar el segundo palo. Ahí entró como un caminó Burn para hacer el 2-0. El árbitro lo anuló, por fuera de juego de Guimaraes, pero el VAR lo confirmó tras una tensa espera.
Comenzaban los sudores fríos en los jugadores del PSG y los aspavientos en Luis Enrique, que no pudo corregir la situación y vio cómo Longstaff entró solo por su carril y con un latigazo raso puso el 3-0.
Era otra catástrofe europea del PSG, que solo sonrió levemente cuando Zaire-Emery, el chico de 17 años que ilusiona a este equipo, se inventó un pase picado por encima de la defensa del Newcastle y catalizó el gol de la honra de Lucas Hernández.
No fue suficiente para remar hacia un posible empate y el Newcastle, que hizo el cuarto en el tiempo de descuento con un golazo de Schar por la escuadra, se mantiene invicto tras dos encuentros en Europa, con cuatro puntos y líderes de este Grupo F. Les sigue el PSG, con tres unidades, el Milan, con dos, y el Borussia Dortmund, con una.