El PSG ha sufrido un duro varapalo este miércoles con la derrota en casa del Newcastle en la segunda jornada de Champions League. Un 4-1 en St. James Park que ha hecho estallar todo con críticas a Kylian Mbappé, que tuvo varios gestos de enfado, y a un Luis Enrique señalado por un sistema que no funcionó reconocido por sus propios jugadores.
Los parisinos salieron de inicio en el estadio del norte de Inglaterra con cuatro delanteros sobre el terreno de juego. Kylian Mbappé jugó en una posición más centrada con Randal Kolo Muani y Ousmane Dembélé por las bandas y Gonçalo Ramos en punta de ataque.
El Newcastle aprovechó los huecos que dejaba el PSG, con un centro del campo incapaz de controlar las rápidas transiciones. De ahí el 4-1 final que provocó la fiesta en las 'urracas' con el primer encuentro en el que los franceses encajan cuatro tantos en fase de grupos de Champions desde 2001, ante el Deportivo.
De las críticas no se ha librado ni Kylian Mbappé, aunque ha sido Luis Enrique el que más ha recibido por ese esquema ofensivo que él mismo ha reconocido: "¿Por qué este sistema? Yo soy el entrenador, yo decido. Pensé que este sistema era lo mejor para el equipo y, de hecho, todavía lo creo. No merecimos este resultado".
"Es injusto, pero así es el fútbol. Felicito al Newcastle, pero ha sido excesivo. Nuestro objetivo es llegar a los octavos de final. Es un grupo difícil y lo sabemos, pero seguimos segundos. Los últimos partidos serán divertidos", declaró el asturiano en sala de prensa.
El autor del gol del partido, Lucas Hernández, también indicó que fue Luis Enrique el que insistió con este sistema: "Fue decisión del entrenador porque queríamos presionar a su defensa. A veces funciona, a veces no, y hoy no, pero tenemos que hacerlo. Seguimos adelante y volveremos a la normalidad".