El Getafe recibe al Sevilla en los octavos de final de la Copa del Rey. Y no estará solo. El conjunto azulón ha llegado arropado por una multitud de aficionados en las inmediaciones del Coliseum Alfonso Pérez.
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Numerosos seguidores del Getafe han recibido a su equipo y al rival. Los alrededores del estadio del conjunto azulón se han teñido de rojo por las bengalas y acompañados de diferentes cánticos para animar al Getafe. "A por la Copa", se escuchaba entre los congregados a la cita copera.
Cuando ha llegado el Sevilla, el recibimiento ha sido hostil. Insultos en forma de cánticos pero sin ningún incidente. Tampoco estará solo el conjunto sevillista. Y es que el número de entradas para su afición ha sido uno de los temas polémicos en la previa del partido.
El Sevilla anunció la pasada semana la venta, primero de 300 entradas, y, posteriormente, de otras 485 localidades, al precio de 30 euros, situación que voló y que aseguró la presencia de más de 700 blanquirrojos en El Coliseum.
Este anuncio se acompañó, poco después con el del Getafe, que confirmaba la venta de entradas para sus aficionados por un precio, mínimo, de 40 euros, algo que no gustó nada a sus seguidores.
El Getafe no presenta ninguna novedad de cara al partido. Bordalás saldrá con un once de garantías para poder estar en los cuartos de final de la Copa del Rey, donde ya cuenta desde hace semanas con el recuperado Enes Unal.
El Sevilla se presenta a la cita sin muchas novedades en la enfermería. Para la cita, Quique Sánchez Flores mantiene a Dmitrovic -como es lógico-, acompañado de una línea de cinco defensas: Juanlu y Pedrosa como carrileros, junto a Nianzou, Sergio Ramos y Badé en la línea de centrales. La defensa, casi al completo, nueva. En mediocampo, Soumaré se mantiene como pivote (Agoumé deberá esperar) y, junto a él, aparece Sow, futbolista que continúa buscando su mejor nivel en el Sevilla.
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