Como ya decidiera Baraja en Cartagena, Alberto Marí repitió titularidad en Mestalla para el partido de Copa contra el Celta. Este era su gran momento para reivindicarse. En el último partido en LALIGA, contra el Cádiz, consiguió dar una asistencia. Acompañado de Hugo Duro, el alicantino trató de buscar el gol que aún se le resiste después de su grave lesión. Desde el minuto 1, Alberto Marí estuvo muy participativo, recibiendo a la espalda y tratando de abrir huecos a sus compañeros. El Valencia CF tuvo que remar a contracorriente a partir del primer cuarto de hora de partido, pues el Celta marcó por partida doble.
Después del gol de penalti de Pepelu, Alberto Marí luchó un balón al espacio. Iván Villar, que salió a despejar, chocó con el delantero valencianista, que se dolió en el suelo por unos segundos. Afortunadamente, pudo seguir. Baraja decidió en el descanso dar entrada a Sergi Canós en perjuicio de Alberto Marí, que no saltó al terreno de juego. Lo intentó pero no materializó. No le llegaron ocasiones manifiestas de gol.
Tras cuatro meses de calvario y su reaparición en la anterior ronda contra el Arosa SC, Alberto Marí fue el elegido como delantero centro para el partido contra el FC Cartagena. Acompañado de Fran Pérez y Diego López en las facetas ofensivas, el canterano fue la principal referencia en ataque. Sin embargo, un tanto falto de ritmo, Alberto Marí aún se mostró lejos del nivel de sus competidores.
Sin embargo, en el último partido de LALIGA contra el Cádiz, sí se vio una mejor versión del alicante. A pesar de no ser titular, dio un gran pase de la muerte a Jesús Vázquez, que marcó a puerta vacía. Con su asistencia contribuyó a que el Valencia CF apabullara por 1-4 al Cádiz. Cabe recordar que fue el pichichi de la pretemporada.