Además de tratar el fichaje frustrado de Gaku Shibasaki y el interés en Unai López y Javi Eraso, Carmelo del Pozo se paró a valorar las dos incorporaciones sí concretadas por el Deportivo en el mercado de fichajes de invierno: el extremo Nahuel Leiva y el central Iñigo López.
Sobre los dos fichajes del Dépor, Carmelo comenzó exponiendo que "hablando con el entrenador, en el mercado de enero es difícil igualar o mejorar lo que tenemos en la plantilla".
Partiendo de esa premisa inicial, "el perfil del lateral derecho lo teníamos cubierto con David Simón y Eneko Bóveda". Por otro lado, "con tres centrales lo que no queríamos hacer era perjudicar al equipo. El central que fuese a venir tenía que tener muy claro su rol, que si debía asumir la situación de cuarto central no crease problemas en el vestuario. Se va tratando el tema con Iñigo López para que pida la rescisión allí (Extremadura) hasta que esa situación se termina de resolver".
Por lo que respecta a la llegada en calidad de cedido de Nahuel Leiva, sobre el cual el Dépor dispone de una opción para prolongar su préstamo un curso más o transformarla en un traspaso, Del Pozo relató que el cuadro coruñés acudió a la ventana invernal "buscando un perfil de un jugador más chisposo, vertical, que se meta hace dentro, que pueda correr y juegue al espacio".
En relación a la composición de las bandas para jugar en un 4-3-3, el módulo táctico elegido por Natxo González durante las últimas semanas, Carmelo destacó que ahora "en la derecha tenemos a Pedro y a Fede y en la izquierda a Borja y a Nahuel", por lo que se mostró satisfecho con las variantes de las que dispondrá el míster de aquí a final de temporada.