Enigma en los laterales

El Deportivo se atasca en sus laterales. David Simón atraviesa un bache pronunciado de rendimiento y Diego Caballo, irregular, ha hecho desaparecer de los planes de Natxo González a Saúl García. A tenor de su gestión del grupo, el míster no parece confiar demasiado en Bóveda, quien se quedó en el banquillo durante el transcurso del Dépor-Alcorcón a pesar de que Natxo decidió sustituir a Simón, al borde de la expulsión. El central italiano Somma se hizo cargo de la banda derecha en la recta final del partido.

En Riazor, el conjunto coruñés no termina de carburar por ambos perfiles. Por un lado, David Simón muestra dificultades para relacionarse con sus compañeros a través de la pelota y, además. sufre contra extremos hábiles y dinámicos; por el otro, Caballo no toma las mejores decisiones con el balón en los pies. Además, la relación de ambos defensas con sus extremos no es la mejor posible sobre el terreno de juego, pues se suceden los errores en la toma de decisiones en situaciones relativamente sencillas de resolver para futbolistas de su nivel.

Al Dépor le cuesta generar superioridades por ambas bandas cuando ataca en estático, en parte porque sus laterales no terminan de responder en un momento crítico de la temporada. El conjunto coruñés decidió no reforzar su banda derecha en el mercado de invierno, apostando por mantener a Bóveda en ese perfil y firmando a un futbolista para completar la rotación en el eje de la zaga, Iñigo López, que todavía no ha debutado y cuya participación se supone testimonial hasta el final de la campaña.

En la primera vuelta, ante las Palmas, los elegidos para proteger ambos perfiles en territorio canario fueron Simón y Saúl. Hasta el momento Natxo González no ha dado pistas sobre quiénes serán los elegidos en el duelo que se disputará en Riazor el próximo domingo 10 de marzo. Independientemente de la elección, las bandas del Deportivo deben dar un paso al frente.