El central del Deportivo Íñigo López, en libertad bajo fianza y suspendido cautelarmente por el Comité de Competición de la RFEF, llegó este miércoles al Estadio de Riazor junto a sus compañeros de equipo para el partido de ida de la promoción de ascenso a LaLiga Santander ante el Málaga.
Competición decidió suspenderle provisionalmente tras las declaraciones que hizo en relación a los presuntos amaños de partidos que investiga la 'Operación Oikos' y después de que la Federación solicitara a este organismo medidas cautelares.
El Deportivo comunicó a la Federación que el jugador no iba a entrar en la convocatoria definitiva para el partido, pero Íñigo López ha seguido en la dinámica de grupo y llegó con el resto de sus compañeros a Riazor desde el hotel de concentración, aunque no estará ni en el once ni en el banquillo y presenciará el choque desde la grada.
La decisión de la RFEF es consecuencia de unas declaraciones efectuadas por el futbolista Íñigo López al diario El Mundo sobre el partido entre el Huesca, en el que militaba el defensa, y el Nàstic, correspondiente al final de la temporada 2017/2018, con los oscenses ascendidos a Primera división y los tarraconenses jugándose la permanencia.
El jugador del Deportivo y exfutbolista del Huesca, considerado por la investigación de la 'Operación Oikos' como un intermediario en la trama de amaños de partidos, afirmó en la entrevista que perdieron ante el Nástic porque tenían "un pacto".