El paso de Beto da Silva por las filas del Deportivo de La Coruña no quedará para la historia. Su bagaje de 237 minutos repartidos en un total de nueve partidos (siete de LaLiga SmartBank y dos de Copa del Rey), solo uno como titular, hacía obligada su salida del club en el mercado de invierno. Ambas partes llegaron a un acuerdo para la rescisión del atacante peruano, que regresaba a su país natal de la mano de Alianza Lima. Ahora, en tiempos del coronavirus, Beto explicaba su elección y el motivo por el que, según él, no ha triunfado en Europa con el Dépor.
"Yo tuve la mala suerte de sufrir mucho con las lesiones, perdí valiosos años, pero estoy curado de eso", aseguraba el exherculino, que además de la blanquiazul también jugó en el filial del PSV en el Viejo Continente. "Hoy estoy bien, me cuido mucho para que no vuelva a suceder", añadía Beto, que abandonaba el Dépor en enero para firmar de cara a las tres próximas temporadas con el Alianza Lima.
"Alianza Lima me venía buscando hace tiempo y eso pesó mucho, además de la confianza que me dio el 'Profe' Pablo, el saber que iba a tener un poco más de continuidad y jugar la Libertadores. Sé que es una linda vitrina para volver a la selección", comentaba Beto al ser cuestionado por los motivos que le llevaban a decidirse por el conjunto limeño.
Y es que el exdeportivista se formó en uno de los eternos rivales de su actual equipo: "Le tengo cariño a Sporting Cristal, pero sé de la rivalidad que hay. Me estoy encariñando con Alianza Lima porque sentí una energía increíble desde que llegué. Quiero hacerme un nombre importante y llegar a convertirme en un ídolo en el club. No pienso en jugar en otro equipo en Perú", sentenciaba.