El lateral del Deportivo Eneko Bóveda ha reconocido que sellar la permanencia supondría un "desahogo tremendo" para el equipo coruñés, colista al final de la primera vuelta, si bien precisó que no se le "ocurriría" celebrarlo fuera del vestuario porque los blanquiazules partían con un objetivo más ambicioso, el de luchar por el ascenso a LaLiga SmartBank.
"No se me ocurriría ir con el pecho fuera por A Coruña por conseguir la salvación con el Dépor, pero dentro del vestuario sería un logro, un desahogo tremendo, porque realmente ha estado difícil en muchos momentos y sigue estando difícil. Y seguro que muchos habían perdido la fe. En privado y con la boca pequeña, lo celebraríamos muchísimo", aseguró en una conferencia de prensa con preguntas a distancia.
"Dentro del vestuario sería un logro, un desahogo tremendo, porque realmente ha estado difícil. Y seguro que muchos habían perdido la fe. En privado y con la boca pequeña, lo celebraríamos muchísimo"
El domingo, el Deportivo intentará superar la barrera de los 50 puntos con una victoria ante el Extremadura, que este jueves certificó su descenso matemático a Segunda B con el empate del Albacete ante el Sporting de Gijón (1-1) y que llegará al Estadio Abanca-Riazor sin jugarse más que el orgullo, un "arma de doble filo", según el defensa del club gallego.
"Cuando juegas algo importante, te puede servir para hacer esfuerzos extra o te puede influir como una mochila pesada con la que cargas y te deja paralizado. Respetamos al Extremadura como a cualquier rival. Lo mejor es esperar a un buen rival y preparar el partido desde el respeto y buscar un buen Dépor", señaló.
Bóveda repasó la primera derrota del Deportivo desde que se reanudó la temporada tras el parón por la COVID-19, el pasado miércoles ante el Málaga (1-0), en La Rosaleda: "En un momento en el que las sensaciones individuales y colectivas eran buenas y que el equipo respondía entraran unos u otros, fastidia o entristece que en un momento en el que era importante dar ese buen nivel o confirmarlo, no lo hiciéramos Eso es lo que las siguientes horas fueran malas. El resultado fue malo, no se puede interpretar como bueno. Eso no quita que tenemos otra oportunidad".
El jugador vasco indicó que "en puntos, el objetivo está cerca, pero también el final de temporada lo está" y dijo que "ahí reside la dificultad y el respeto que hay que tener a un objetivo que se había complicado mucho y ahora después de cada partido parece que está lejos o cerca".
El lateral, que juega también como central, explicó que el Deportivo intentará "sacar una victoria cuanto antes" para sellar, al menos de manera provisional, la permanencia: "Es el objetivo que tenemos, sin mirar calendarios ni hacer quinielas. Hay que estar ocupados en lo que podamos influir y preparar el partido como el más importante del año".