El Deportivo aún no ha dicho la última palabra decía Borja Jiménez antes de que su equipo afrontase una final en Riazor ante la Cultural. Solo valía ganar para seguir peleando por el primer puesto que garantiza el ascenso directo y este sábado el Dépor volvió a hablar. Y lo hizo a través del pichichi del conjunto blanquiazul que esta vez sí salió de titular. Quiles adelantó a su equipo en dos ocasiones y resucitó a un equipo al que todavía se le notó miedo y presión pero que supo salir finalmente airoso de la situación (2-1).
El balón empezó en los pies de la Cultural y con la afición blanquiazul animando sin parar. El primer disparo a puerta fue del equipo visitante a los cinco minutos aunque sin peligro para Mackay y desde fuera del área. También el primer córner del partido fue para la Cultural tras un despeje de Jaime Sánchez. Tampoco tuvo consecuencias. Mientras, Villares ponía la profundidad en el Dépor por el lateral derecho. Los coruñeses espabilaban. Riazor empujaba y había ganas de marcar y adelantarse en el marcador aunque los nervios también acechaban y se notaban. El partido no estaba aburrido y el primer disparo a puerta del Deportivo llegó a los 25 minutos tras una buena jugada de William de Camargo. El brasileño entró por la izquierda, regateó y disparó pero falló por poco la puntería. El encuentro seguía abierto.
En el 34', el pichichi, el killer, el que no había gozado hasta el momento de ocasiones y había ayudado más en tareas defensivas tuvo la primera ocasión y no falló. Con tres jugadores de la Cultural delante, regateó, disparó raso y marcó. Quiles marcó su gol número 11 con el Deportivo y adelantó a su equipo. El nueve blanquiazul celebró el tanto mostrando su nombre en la camiseta y gracias a él y a su peligro el Deportivo se fue al descanso con ventaja.
El segundo tiempo empezó con más dominio blanquiazul. Y con demasiada confianza, también. Y es que Lapeña se despistó y su gran despiste propició que Solís disparase a puerta vacía y empatase el partido. El central del Dépor llegaba con ventaja y cometió un grave error que costó el empate. Jarro de agua fría que, afortunadamente esta vez, no amilanó al Deportivo. William llegó al área contraria y al brasileño le hicieron penalti. El colegiado valenciano Iván Muñoz lo pitó y ¿quién tiró? El que no falla. Quiles lanzó también rasito y dio la vuelta al marcador. Lapeña lo abrazó como diciendo 'menos mal'.
De nuevo ganando y contra diez, el equipo de Borja Jiménez quería más goles. Miku tuvo una clarísima de cabeza pero el balón se fue a las manos de Sostres. Quiles amagó y encaró y a punto estuvo de marcar el tercero por la escuadra. Pero la Cultural también intentaba asustar y no parecía que jugaba sin Fran Cruz, es decir, con un jugador menos. Al Dépor le pesaba el miedo pero aguantó y los tres puntos se quedaron en Riazor. Ahora toca pensar en Balaídos.