Su larga trayectoria futbolística le hace apreciar todavía más cada instante que pasa dedicándose a este deporte. Y es que algunos de sus excompañeros que ya no tienen la suerte de jugar al fútbol le han dejado claro lo mucho que se echa de menos. Por eso Miku, que cumplirá 37 años el próximo mes de agosto, saborea con felicidad su etapa en un Dépor con el que espera ascender y del que se ve también formando parte el próximo año en Segunda División.
Este veterano delantero venezolano se inició en el fútbol cuando las redes sociales no acaparaban tanto protagonismo y, aunque ahora se ha hecho de piedra, el dorsal número siete del Deportivo relata en esta entrevista en vídeo concedida a ElDesmarque un episodio que le marcó y le llevó a aparcar las redes durante cinco años. Charlamos de las redes con el atacante blanquiazul pero, también, de la situación deportiva de su equipo y de su papel dentro del conjunto de Borja Jiménez.
-Antes de nada, ¿cómo te encuentras después de tu lesión, ya totalmente recuperado?
-Sí, ya estoy bien. Poco a poco voy sumando minutos y teniendo mejores sensaciones. Al final es un proceso natural que todos pasamos cuando salimos de una lesión y hay que llevarlo con tranquilidad
-¿Te exprimió demasiado Borja?
-No, no considero eso. El entrenador tiene que tomar la decisión que él considere que es positiva para el equipo y nosotros como jugadores o trabajadores hacer lo que nuestro jefe nos pide. La verdad es que en ningún momento yo me sentí cansado, tampoco sentí que me estaba exprimiendo. Tengo la suficiente experiencia como para decir cuando estoy cansado "oye, un cambio" pero también por mi forma de jugar que, a veces es mucho de contacto, de cuerpo a cuerpo, de pegarme en el buen sentido con dos o tres jugadores en el campo y los partidos cuando están ajustados se necesita ese desahogo de que aguante el balón para ayudar y a veces mi juego se antoja necesario. Entonces se conjugaron muchas de esas cosas y al final jugué todos los minutos que jugué pero no considero que haya sido exprimido.
"En ningún momento sentí que Borja me estaba exprimiendo"
-El domingo os enfrentáis al Talavera y fue justamente ante este rival contra el que marcaste tu último gol el pasado 9 de enero. ¿Tienes buenas premoniciones para este encuentro?
-Ojalá yo supiera lo que va a pasar en el futuro. Sería fantástico para la vida en general (risas). Lo afrontamos con la misma ilusión que todos los partidos sabiendo la responsabilidad que tenemos, la posición en la que estamos ahora en la tabla, de que a todos los equipos les urgen los puntos por sus objetivos y va a ser duro. Han tenido un cambio de entrenador que les ha permitido tener una mejoría y una dinámica diferente pero nosotros también con nuestro objetivo a la vista tenemos que centrarnos sabiendo y entendiendo que va a ser un partido muy complicado ante un rival que ha mejorado muchísimo, que está haciendo las cosas bien y nos lo va a poner muy difícil. Como no estemos igual que ellos a nivel de intensidad, de esa lucha y ese oficio, vamos a pasarlo mal y eso es lo que tenemos que igualar ante todos los rivales.
-Tú que cuentas con muchas experiencias en el mundo del fútbol, ¿qué le ha pasado al Dépor para cambiar tanto su dinámica? ¿Tanto os desquició el aplazamiento del partido ante el Racing de Santander o no fue solo eso?
-No solo un factor fue fundamental para el cambio de dinámica que tuvimos y ese bajón tan grande de resultados y de juego. Fueron muchas cosas que se juntaron. Te podría decir partidos en los que merecimos más pero la pelota no quiso entrar, perder contra tu rival directo en casa, que te aplazaran un partido sin motivo cuando no había razón para hacerlo, también vernos en Navidad con esa ventaja tan grande y que todo el mundo diera por sentado que ya habíamos conseguido el objetivo, la presión de nuestro propio entorno que aquí es muy fuerte cuando las cosas no salen bien en un partido y tenemos un grupo muy joven que no sabe lidiar con ese tipo de presión todavía...Creo que todos esos factores se conjugaron para que el equipo entrara en una dinámica que no era positiva, quería salir pero no podia y poco a poco yo creo que estamos recuperando la esencia y la dinámica que teníamos antes y tener muy claro cual es el objetivo ahora y saber que ya ha pasado todo ese torbellino de situaciones ha hecho que el equipo haya mejorado y haya conseguido aplomo y saber llevar los partidos con más calma. Esto nos va a permitir llegar en un buen momento para el play off.
-Hablas de la presión sobre los más jovenes pero los más veteranos cómo tú ¿también os habéis visto superados por ella? En tu caso concreto por la sequía goleadora...
-Yo sé y lo he vivido muchas veces que los goles vienen y van. Cuando yo estaba haciendo goles, Quiles pasó por su racha negativa. Ahora es al revés. Gracias a Dios, tenemos jugadores que cuando unos no están, otros responden y eso habla bien del grupo que tenemos porque, al final, no es el 'Deportivo Miku', el 'Deportivo Quiles' o el 'Deportivo Borja'. Al final es el Deportivo de la Coruña y todos los que estamos en el club vamos por el mismo objetivo. Todos necesitamos de todos, todos tienen que ser importantes y todos tienen que sumar. Los que juegan y hasta los que sacan fotocopias en las oficina porque todos tenemos un objetivo común. Y a nivel personal yo estoy muy tranquilo. El gol va y viene y estoy seguro de que cuando entre el primero se vuelve a abrir el arco y volverá a pasar. Lo que tengo que estar es en el día a día trabajando para que eso me llegue cuanto antes y cuando estemos en el partido, tener las oportunidades. Hace unos meses, lo hablaba con el míster, estaba jugando mucho pero si repasas, ocasiones de gol no tenía. Tenía otro tipo de trabajo y otro tipo de juego que también es importante pero no tenía ocasiones de gol. Creo que estuve siete partidos sin tirar a puerta. Chuté contra el Badajoz, la pegué al palo, el otro día salí contra el Bilbao y tuve una media ocasión, ante el Dux tuve una buena ocasión que el portero para y poco a poco eso va a ir llegando. Estoy confiado y tranquilo porque, cuando llegue la hora de la verdad voy a estar en buena sintonía.
-¿Crees que a veces se centra uno demasiado en las críticas al delantero sin analizar el esquema y el juego marcado en cada partido?
-Efectivamente. Nuestra posición tiene es hándicap. Es como el portero. Puede parar 50 pero si en una no está bien y te meten gol, puedes perder un partido. Y en nuestro caso es así. Se juzga muchas veces el gol. "Ah, no hizo gol o no tuvo ocasión de gol" pero los que realmente saben de fútbol, me refiero a los que están dentro del mundo del fútbol entienden que un delantero hace muchas otras cosas en beneficio del equipo. En esos partidos que no hice gol, luego analizaba con el míster y compañeros de segunda línea habían hecho gol por movimientos míos o por arrastres míos de jugadores. Yo sé que el fútbol es así y me abstraigo del elogio que tenía antes mucho y me abstraigo también de las críticas. Yo estoy muy tranquilo y lo que el entrenador me dice, que es quien tiene que juzgarme es lo que me interesa y sentir que tengo el respaldo de mis compañeros también es muy importante y eso nunca lo he perdido.
"Me abstraigo del elogio que tenía antes mucho y me abstraigo también de las críticas"
-Un entrenador con que el que ya manifestaste a principios de temporada que con él estabas contento porque "por fin había un plan de partido" y él también ha depositado confianza en tí. No cabe duda de que la relación con Borja, que, además es de tu edad, es buena...
-Sí, es buena y él sabe muy bien que los jugadores con más recorrido como Álex, Ian, Borja Granero, Héctor yo estamos aquí para ayudarle. En ningún momento pretendemos hacer guerra con él ni nada porque sería perjudicial para todos, tanto para él como para nosotros. Él está aquí por nosotros y nosotros aquí por él porque peleamos por mismo objetivo y sabiendo que hay un grupo joven con mucho talento que no ha vivido esas batallas como nos ha tocado a nosotros pero pueden aportar cosas. Borja comenta conmigo aspectos ofensivos, con Álex cosas defensivas o con Ian cosas del portería y en esa sintonía estamos todos. Y en lo referente al plan de partido es un poco como con Rubén (De la Barrera), que yo viví el año pasado. Son entrenadores que estudian y preparan mucho los partidos, que no han sido jugadores pero que a nivel de preparación están muy bien y van sacando los partidos y sus éxitos. Es el fútbol que está cambiando ahora, esa dinámica de entrenadores nuevos y estamos en esa sintonía de hacer las cosas bien.
-Y cuesta con tu experiencia como jugador no mandar más o decidir un poco más los veteranos cuando se producen situaciones cómo la que acaba de vivir el equipo...
-Nosotros desde nuestra 'plataforma' en el vestuario podemos apretar a la gente, dar voces, dar consejos pero en ningún momento tenemos que pasar de la línea de jugadores. El cuerpo técnico es el que tiene que marcar ese ritmo en cuanto a ese tipo de apreciaciones y siempre desde el lado constructivo como así ha sido. El entrenador nos ha dicho lo que hemos hecho mal pero desde el punto de vista constructivo. Nunca para destruirnos o desmoralizarnos. Si alguien tiene que decirnos las cosas tiene que ser él. Obviamente, los veteranos también podemos dar nuestra opinión pero nunca pasar esa línea de querer mandar más porque al final eso no nos compete. Tenemos que dejar que los jugadores sean jugadores y los entrenadores, entrenadores.
-En alguna ocasión has comentado que se tenía una imagen equivocada de Miku en el deportivismo, ¿te has quitado ya esa espinita jugando en un Dépor con el que, además, guardas relación desde pequeño?
-Si, sobre todo porque el año pasado vine de un Covid largo, de mucho tiempo sin entrenar, sin jugar, físicamente no estaba a tono y la gente pensó cosas que no eran y tenían una imagen equivocada. Eso me fastidiaba bastante. Al final, las lesiones son parte del fútbol. Ahora tenemos un chico con 18 años (Trilli) que es su primer año profesional, es internacional y está en un bucle y le está costando salir. Me pasó a mí con el aductor el año pasado. De hecho, jugué partidos roto por exigencias del grupo y eso la gente ni lo valora pero era lo que tocaba hacer. Este año esa fue una de las cosas que hablé con el club, que si decidían contar conmigo, estaría muy agradecido pero quería hacer una pretemporada para no tener problemas. Y jugué, me he perdido semanitas, que en 38 jornadas no está mal a mi edad y, a partir de ahí, intentar sumar como todos. Y esa es la imagen que quiero. Quiero que cuando me vaya de aquí, que sea dentro de mucho tiempo, pero la gente diga "el tío se dejó la piel, tuvo un ascenso en el bolsillo con el equipo, vivió como nadie estar en el Deportivo y ahora pasea por Oleiros de lo más contento de la vida".
"La gente pensó cosas que no eran y tenían una imagen equivocada. Eso me fastidiaba bastante"
-Además, tú con el Dépor tienes vinculación desde pequeño...
-Sí, de hecho ayer hablé con uno de mis mejores amigos que le mandé la camiseta en Navidad, con mi compadre. Hay mucha relación, hay muchos gallegos en Venezuela y ahora muchos venezolanos en Galicia. Con el Deportivo ya pude haber venido a jugar en Primera en la época de Tino pero la negociación no fructificó y siempre estaba ese deseo. Ahora que estoy aquí lo estoy disfrutando y viviendo con mucha alegría. Sé que no me quedan quince años de carrera. Sé los que me quedan y vivo todo al máximo, sobre todo, por experiencias de compañeros que lo han dejado que se echa mucho de menos. Este no es mi último año, ni el que viene, estoy seguro de eso. Y como veo el fútbol hoy en día que se va alargando. Veo a Jorge Molina, veo a Joaquín, veo que Rubén Castro o Stuani están en Segunda marcando goles pues digo que mientras uno sea útil, se sienta físicamente bien, compita, el entrenador cuente... Y no me refiero a jugar porque la gente confunde y piensa que tienes que jugar todos los partidos. Lo fundamental es sentirse parte. A lo mejor no juegas treinta partidos pero juegas quince de calidad porque es lo que el equipo necesita. O existen casos como los de Yuri en la Ponferradina que juega todos los partidos, prácticamente. En la semana casi no entrena pero los domingos rinde. El fútbol da muchas vueltas. La clave es sentirse útil y parte de un grupo y de un proyecto. Es fundamental que se necesite de ti aportando y ayudando. Para eso estamos.
"Este no es mi último año, ni el que viene, estoy seguro de eso"
-Te has comprado una casa aquí, estás contento en la ciudad, en el entorno ¿te ves entonces para el año en Segunda con el Dépor y formando parte también del futuro de este club?
-Por supuesto. A nivel familiar y a nivel deportivo estamos muy bien aquí. Siempre me habían hablado muy bien de la ciudad. Venía siempre a jugar. Cuando venía en Primera venía dos días y me iba y decía "siempre llueve y siempre lo veo triste y gris" pero eso es cuando uno habla desde el desconocimiento. Luego estás aquí conoces el día a día, a la gente por la calle... y no hablo de un gran empresario, hablo del frutero, hablo de la señora del edificio que saluda a mis niñas como si fuera la abuela y todo eso hace que nosotros nos hayamos planteado quedarnos aquí. Ya dimos el primer paso y aquí estamos.
"Con el Deportivo ya pude haber venido a jugar en Primera en la época de Tino pero la negociación no fructificó"
-¿Mejor que en Valencia?
-Diferente. Las niñas están muy bien aquí. Nosotros estamos súper felices en un buen ambiente muy familiar, de gente trabajadora. Una ciudad que tiene grandes industrias y nosotros consideramos que es una ciudad que está en crecimiento, en desarrollo, que ofrece todo, que no hay tráfico, todo está cerca, todo es accesible y todo es muy ameno y estamos encantandos.
-Y cuando quieras sol garantizado pues un viaje de ida y vuelta...
-Sí, claro. Además, ahora con el AVE ya estamos más conectados. No hay ningún problema.
-Por cierto, en tu larga trayectoria tú has conocido el fútbol sin redes sociales...
-Si y muy bien. Ahora hay mucho entrenador de Instragram, de youtube o de facebook. Hay que convivir con ello. Antes era que el que quería saber de fútbol que viniera al campo y lo viera. Ahora no. Ahora un tío que está a 15.000 kilómetros te puede hacer un comentario de ti o de tu juego. Tienes que saber convivir con eso y no hacer caso de lo bueno ni tampoco de lo malo. Yo dejo que la gente hable, lo respeto, a mí que me respeten, que no se metan con mi familia. A mí que me digan de todo, yo soy de piedra porque ya lo he vivido en otras categorías donde la presión era bien fuerte en Primera División o jugando los miércoles por la noche, que hay poca gente que juegue a esa hora, y hay que tratar de abstraerse.
-Aunque tú las redes sociales las sigues bastante...
Sí, aunque estuve cinco años apartado de las redes por un comentario que me hicieron en un partido de la selección de Venezuela contra Ecuador. Me acuerdo clarito. Me dolió mucho porque sentí que había sido injusto y estuve cinco años sin publicar nada, casi ni las miraba pero luego con gente de mi entorno me hicieron entender que es el día a día de hoy. Y pensando también en mis hijos que son millennials y tecnológicos pues también tengo que estar en la onda de ellos. Entonces decidimos reactivarlas pero lo que la gente no sabe es que las maneja una empresa. Yo lo único que hago es mandar la foto y contestar los mensajes.
"Ahora hay mucho entrenador de Instragram, de youtube o de facebook"
-En tus redes sí se colgará alguna celebración especial cuando el Dépor ascienda...
-No,no,no. No hay promesas raras de pintarme el pelo ni nada de eso (risas). Vivirlo con mucha alegría porque ya viví un ascenso siendo muy joven. Lo disfruté muchísimo pero siento que ahora lo voy a disfrutar más porque ya sé lo que es el fútbol en las buenas y las malas.
-Entonces, ¿el ascenso lo das por hecho?
-No lo doy por hecho pero la ilusión está ahí, es el objetivo y tenemos que ir a por ello.
-La vía para alcanzarlo es el play off, ¿ves peligroso lo que se está comentando de que si quedáis segundos después podéis ascender, incluso, empatando?
-Sí lo es. A mí la experiencia me ha demostrado que cuando sales a empatar acabas perdiendo y eso sería ser conformista. Y este grupo no es conformista. Hay que ir a ganar todos los partidos por nuestra forma de encarar la competición, por el escudo que representamos y yo no creo que ningún deportivista quiera ver que su equipo sale al campo a empatar, su equipo sale a ganar. Luego el fútbol y los partidos son como son porque pasan mil cosas pero hay que salir siempre a ganar y ese es el objetivo de este equipo.
"La experiencia me ha demostrado que cuando sales a empatar acabas perdiendo y eso sería ser conformista. Y este grupo no es conformista"
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