El Deportivo de la Coruña volvió a ganar… pero sin convencer. Aunque el partido contra el Talavera apuntaba a ser plácido después de adelantarse en el marcador con goles de Diego Villares y de Adrián Lapeña, acabaron sufriendo de lo lindo, pues los visitantes recortaron distancias poco antes del descanso. Álex Bergantiños aumentó la distancia ya en el segundo tiempo, pero los manchegos nuevamente se metieron en el partido y pelearon hasta el último segundo.
Finalmente, los tres puntos se quedaron en Riazor, la mejor noticia posible para Borja Jiménez Sáez. Con este resultado se colocan cuartos en la clasificación, superando al Real Madrid Castilla y al Fuenlabrada, y quedándose a dos puntos del Racing de Ferrol y del Linares, y a cuatro del Córdoba, que es líder en solitario, contando todos sus encuentros por victorias. No están lejos del objetivo, pero no pueden estar satisfechos, eso está claro.
Porque la obligación debe de ser el ascenso, y a ser posible, de manera directa, para evitar sufrimiento en el ‘play off’, donde siempre puede haber sorpresas, como ocurrió el curso anterior, cayendo en la final, y jugando como locales, frente al Albacete Balompié. Por si acaso lo habían olvidado, el presidente de la entidad gallega, Antonio Couceiro, se ha encargado de recordárselo a todo el mundo, afirmando que “estamos convencidos de que con este nivel de plantilla y este cuerpo técnico vamos a conseguir el ascenso”.
“Tenemos un amplio margen de mejora y estoy absolutamente convencido de que con este nivel de plantilla y con este cuerpo técnico que está trabajando como un verdadero equipo lo vamos a conseguir” añadió para finalizar sus declaraciones a ‘La Opinión de A Coruña’. Un mensaje para animar a la plantilla del Dépor, pero que también sirve para meter presión a Borja Jiménez. Todo lo que no sea regresar a La Liga SmartBank será considerado como un fracaso estrepitoso, con todo lo que eso conlleva.
Así que el ex técnico del Mirandés tiene la obligación de lograr el ascenso, sino quiere ver como su puesto de trabajo peligra.