Ian Mackay, cancerbero del Deportivo, se ausentó la pasada semana por problemas médicos. El guardameta quiso explicar esta mañana, en sala de prensa, el motivo de su baja.
El potero coruñés de 37 años fue baja la pasada jornada en Primera División RFEF debido a un episodio de desmayo del que ya no corre ningún peligro. Esta mañana, en la sala de prensa de Abegondo, el cancerbero tomó la palabra para explicar la situación. "El jueves estaba en mi casa cenando tranquilamente y sufrí un episodio de desmayos. Fui al hospital después de esto. Tuve que pasar la noche en observación", relató sobre el momento que le tocó vivir.
Mackay ha tenido que realizarse muchas pruebas médicas para poder confirmar que su salud no corre ningún riesgo. El miércoles regresó a los entrenamientos con el grupo. "Hasta tener todas las pruebas bien el cardiólogo no me dio el visto bueno. Las pruebas han salido bien y me he podido reincorporar", explicó, antes de añadir que el lunes en Abegondo estuvo ejercitándose como parte de las últimas pruebas que tenía que hacer.
El portero coruñés reconoció haber pasado un susto, ya que no le había sucedido nunca algo parecido, pero ya está "al 100%". Está disponible para Óscar Cano, pues tiene el visto bueno de los médicos. "El cardiólogo dio permiso para poder hacer todo con normalidad", contó.
Mackay reconoció que el miedo era a que saliese algo mal, pero que como las pruebas fueron bien, no tiene ningún tipo de miedo. "Yo estaba tranquilo hasta los resultados porque fue ese día solo. Es normal que los médicos quisieran ver todas las pruebas." a lo que añadió que el fin de semana se quedó con la espina de ayudar. "Yo estaba fastidiado porque quería viajar y ayudar al equipo".
Por suerte y como él mismo relató, todo se queda en un susto. Mackay entrenará con normalidad y estará disponible para el domingo.