Óscar Cano se acoge a Riazor ante su posible última oportunidad: todo o nada para el Deportivo

El Deportivo volverá a preparar con dos sesiones a puerta cerrada en Riazor el próximo encuentro en casa como ya ocurrió ante el Celta B. El Fuenlabrada podría ser el verdugo de un Óscar Cano que se acoge a los partidos de local para salvarse, en los que el equipo herculino es el mejor de Primera Federación y mejora notablemente su imagen a la mostrada fuera de A Coruña. Para el director técnico de 50 años podría ser su última mano en una partida de póquer en la que las cosas le están yendo cada vez peor.

Un banquillo que quema y que es muy apetecible. Esa es la situación por la que pasa ahora mismo Óscar Cano, en el foco de la crítica de la afición deportivista. Tras un mes en el que las cosas no han funcionado en la parroquia herculina, los continuos tropiezos como visitante llevan al técnico nazarí a una situación límite. El sábado vivirá su segunda final.

Ganó el match point ante el Celta B, pero no fue suficiente para calmar a una hinchada muy enfadada tras la última derrota ante Unionistas. Y el domingo, según explica La Voz, el entrenador granadino se juega el puesto. Con cuatro puntos de desventaja sobre la cabeza pero hasta tres equipos por encima y un calendario que asusta, no ganar podría ser totalmente definitivo. Incluso el play off de ascenso podría peligrar en caso de derrota.

Óscar Cano se refugia en Riazor

En casa el Deportivo es otra cosa. Un equipo prácticamente imbatibles y que lidera el ranking de competidores como locales. Es el equipo que suma mejores números en su propio feudo y a eso se acoge Óscar Cano.

El técnico nazarí preparará la próxima jornada ante el Fuenlabrada con cuatro entrenamientos desde el martes. Dos en Riazor (miércoles y viernes) serán a puerta cerrada. Cartas ocultas para jugársela a una mano. Solo vale ganar.