El Deportivo venció 4-2 al Fuenlabrada en un partido que se puso cuesta arriba en los primeros compases. Lucas Pérez y Alberto Quiles lideraron la remontada en una tarde mágica en Riazor en la que homenajearon a las leyendas campeonas de la Copa España 1912 y recibieron el primer trofeo de la historia del club.
No iba a ser una tarde tranquila en Riazor. Óscar Cano se jugaba mucho y, en frente, estaba un Fuenlabrada con una historia más que conocida por todos. Y eso a Riazor, que no descansa ni en Semana Santa, le motiva el doble. Hasta la alcaldesa estaba pendiente. Con un tiempo que invitaba a recorrer el Orzán y olvidarse de la pelota, Dépor y Fuenla se citaron para darse bofetadas hasta no poder más. En un duelo caliente desde el minuto uno con algunos de los supervivientes del Fuenlagate presentes y muchas cuentas pendientes.
Pero todo estaba preparado para que fuese una tarde de fiesta. Y aunque la historia empezó de forma desagradable, con el Fuenla adelantándose, Quiles y Lucas lideraron una remontada que permite al equipo soñar con el ascenso directo.
Un error de Rubén Díez cuando apenas se llegaba al minuto 20 fue el pistoletazo de salida para una locura que careció de sentido. El maño regaló una pelota a Ibán Salvador, que después de rascarle una amarilla a Villares y otra a Lucas Pérez, quiso silenciar Riazor con un disparo exquisito desde casi el círculo central que sorprendió a un adelantado Ian Mackay. El Dépor tenía la posesión y cogió a todo el mundo 'relajado'. Nadie esperaba el error de Jamelli ni el disparo del '6' rival, uno de los pocos supervivientes del Fuenlagate.
A partir de ahí, ocasiones y más ocasiones de un Deportivo que se tropezaba una y otra vez con Craninx. El cancerbero malacitano de origen belga rozó el milagro en varias ocasiones. Nadie en Riazor comprendía como eso seguía en desigualdad, pero Alberto Quiles puso remedio. Tras la enésima caída de Lucas a banda izquierda, el '7' conectó por arriba con el '9', que se impulsó por encima de su marca para imponerse y poner el 1-1 de cabeza.
La alegría no duró nada. Literalmente. En la jugada posterior, un despiste, un balón largo y un centro atrás fue suficiente para que Santi Jara se anticipase a Antoñito y reventase la pelota para batir de nuevo a Mackay. Solo habían pasado unos segundos desde el empate y a los herculinos les volvía a tocar remar.
Pero, esta tarde en Riazor, parecían decididos a dar a Óscar Cano su primera remontada. Y Mario Soriano, que ya había probado suerte con un disparo desde la frontal y estaba cuajando un gran partido, anotó desde fuera del área con un disparo cruzado al que no pudo llegar Craninx. Rasa y a la base del palo, donde no puede llegar absolutamente nadie. De nuevo empate y todo a resolverse en la segunda parte.
La segunda parte fue más tímida que la primera. Como el sol, las pulsaciones iban cayendo en Riazor. Aunque se resistían a marcharse, hacía falta un extra. Luces en la grada y Max Svensson en el césped, para encender y dinamitar un partido que requería de revoluciones.
Tardó en desperezarse el Deportivo, pero después de dos llegadas se animó y acabó encontrando la remontada. Recurrió a lo que ya había funcionado una vez. Carnero buscó a Lucas en la izquierda, que de nuevo cayó por un perfil por el que no era casualidad que se dejase ver una y otra vez. El '7' estuvo más lejos del área que nunca para romper a la espalda de Coch e Iribas (anteriormente Cubero) y buscar en el área a Alberto Quiles. El '9' volvió a imponerse por arriba y con un testarazo certero puso el tercero.
Ian Mackay salvó a los suyos cuando más lo necesitaba y, cuando parecía que al Dépor le tocaría sufrir, apareció Lucas para sentenciar. Había participado en la fiesta con dos asistencias, pero tenía que dejar su sello. Aprovechó un libre directo para cruzar un golpeo perfecto a la base del palo. Imposible para Craninx. Celebración, coreo con su nombre y a la caseta a descansar. Ovación incluida para despedir a 'O neno de Monelos'. Siempre Lucas.
Once Deportivo: Mackay; Antoñito, Lapeña, Pablo Martínez, Carnero (Lebedenko, min. 82); Rubén Díez (Bergantiños, min. 82), Villares, Isi Gómez (Svensson, min. 60); Quiles (Saverio, min 82), Lucas Pérez y Mario Soriano.
Once Fuenlabrada: Craninx; Cubero (Iribas, min. 37), Sotillos, Coch, Barbosa; Álvaro García, Iban Salvador, Cristóbal Márquez (Enzo Zidane, min. 80); Fer Ruiz (Aguirre, min. 80), David Vilán (David Amigo, min. 68) y Santi Jara.
Árbitro: Miguel González Díaz (Comité asturiano). Amonestó con tarjeta amarilla a los jugadores locales Lucas Pérez, Villares, Isi Gómez, Lapeña, y a los visitantes Álvaro García
Goles: 0-1 Salvador (min. 19). 1-1 Quiles (min. 30). 1-2 Santi Jara (min. 31). 2-2 Mario Soriano (min. 37). 3-2 Quiles (min. 74). 4-2 Lucas Pérez (min. 87).
Estadio: Riazor (19.610 espectadores)