Los niños del campus del Deportivo se volvieron locos al ver a Lucas Pérez entrenar a lo lejos y comenzaron a corear su nombre. El Deportivo regresaba esta mañana a los entrenamientos y, a algunos metros, pasaban algunos de los niños que participan por las mañanas en las actividades deportivas del club. Cuando uno empezó, todos le siguieron. Gritos de "Lucas, Lucas" y una realidad: todos quieren al ídolo coruñés.
El Deportivo ha vivido un verano duro para la afición. De una tacada ha perdido a dos referencias para los más pequeños como Mario Soriano y Quiles, además de a la gran leyenda herculina de la última década, Álex Bergantiños. Sin embargo, todavía quedan algunos jugadores de referencia en el club. Prueba de ello es ver a los más pequeños. Aprovechan cada momento en Abegondo para tratar de conseguir una firma o lanzar su grito a los jugadores. Y, claro, cuando se trata de Lucas Pérez, todos se vuelven locos.
Ya antes, algunos pequeños al ver a Ian Mackay se animaron a intentar conseguir un saludo. Pero, cuando un grupo volvía de regreso hacia el centro de las instalaciones, empezó el griterío. Mientras la primera plantilla dirigida por Imanol Idiakez entrenaba bajo la atenta mirada de Juanjo Expósito, Álex Bergantiños o Massimo Benassi, los niños estaban a lo suyo. No entienden de líos, triunfos o derrotas. Solo de pasión. Y en esa pasión, Lucas Pérez es el gran ídolo.
"¡Lucas!... ¡Lucas!..." comenzaron a gritar los pequeños desde una grada hasta hacerse oír. Locura absoluta por el de Monelos. Lucas Pérez seguirá una temporada más en el Deportivo y volverá a ser el gran ídolo de la afición.
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