Scaloni jura amor eterno al Deportivo y se anima a cantar: "Lo mejor que me pasó en la vida"
Locura absoluta en A Coruña con Lionel Scaloni y su pregón. El argentino, de la mano de Inés Rey, dedicó unas palabras a una plaza de María Pita que estaba completamente llena. Rebosaba de banderas blanquiazules y argentinas. Poco después de que el seleccionador argentino se parase con absolutamente todo el mundo para sacarse fotos y firmar autógrafos, y tras el saludo protocolario en el ayuntamiento, salió al balcón en el que en su día celebró un título para jurar una vez más amor eterno al Deportivo. Incluso, animado por los fans, cantó aquello de "cómo me voy a olvidar... fue lo mejor que me pasó en la vida".
Puedes ver parte del pregón en el vídeo que encabeza esta noticia
Regresa Scaloni al balcón del ayuntamiento. Y, al igual que aquella vez hace dos décadas, estaba la plaza de María Pita a rebosar. "Aquí estaba más alterado, es la prueba de que uno va madurando", bromeaba Leo cuando se dispuso a hablar directamente a una masa enfervorecida que nada tenía que envidiar. Camisetas blanquiazules y celestes, porque la representación de Argentina fue inmensa en la llegada del técnico campeón del mundo. "La alegría es la misma. Es inmensa", prosiguió antes de pararse en un detalle. Una bandera.
"Grazas por levar o Dépor por bandeira", leyó antes de agradecer y expresar su verdadero sentir. "Es lo mejor que me llevo de acá.
Scaloni promete volver
Entre vitoreos, cánticos y alguna que otra recomendación, Scaloni repitió aquello de que volverá. Ante su público, que gritaba "entrenador, entrenador, entrenador" desde la Plaza.
"Allá donde este se que llevaré esta ciudad en el corazón y nuestros caminos se volverán a encontrar"
Además, el de Pujato insistió en que esa masa que estaba allí animando tenía que replicarse cada fin de semana en Riazor. Sea cual sea la categoría, se banca el escudo. "Necesitamos esto. Esta alegría. Si nos unimos y tiramos para adelante, con esta atmósfera no puede ir mal. Me gustaría que toda la ciudad esté así cuando juegue el Dépor", pidió.
Tuvo que hacer varias pausas un Scaloni emocionado, que acompañado de sus hijos había llegado a Coruña sin imaginar lo que se le venía encima. Entonces y como se puede ver en el vídeo que encabeza esta noticia, Scaloni se animó con dos canciones. Primero la suya. "Ya me había olvidado de la canción y me trae recuerdos indudables y una alegría inmensa", bromeaba antes de que volviese a sonar.
Luego, impulsado por la afición, la canción del Centenariazo.
Y acabó despidiéndose, volviendo adentro y marchándose después de que cada una de las personas presentes se sacase una foto más. Un autógrafo más. Llevaba cientos, por no decir miles, a lo largo del día el héroe de Pujato. No le importaba, siempre tenía una sonrisa más.