Las peleas entre aficionados rusos e ingleses antes y durante el partido que enfrentó a las dos selecciones en la Eurocopa de Francia tuvieron un caldo de cultivo para echarse las manos a la cabeza. De hecho, en Rusia se crearon diversos castings para premiar a los hinchas más específicos.
Para ello, estos radicales rusos debían demostrar en las pruebas ser los más fuertes, además de unirse en grupos muy numerosos para aventajar a la afición rival. Unos castings en medio del bosque y con la supervisión de los líderes. Todo pensado y más que pensado para pelear en Francia.
Hasta tal punto tuvo éxito esta participación que en varias de las pruebas llegaron a concentrarse casi 200 hinchas, con el objetivo de ser uno de los héroes en tierras galas en el caso de llegar a las manos, o a lo que fuera, con otros radicales.