Gales sigue adelante en la Eurocopa y ya está en cuartos de final después de eliminar a Irlanda del Norte. El equipo británico cuenta entre sus jugadores más destacados con Ashley Williams. El central del Swansea City está siendo uno de los más destacados del torneo por parte del conjunto galés y dio durante el partido contra el cuadro norirlandés una muestra más de su fortaleza física y compromiso con el equipo al negarse a ser sustituido tras recibir un fuerte golpe en su hombro izquierdo tras un choque con su compañero Jonathan Williams y continuar sobre el campo hasta el pitido final a pesar de tener su hombro dañado.
Durante las semifinales del Mundial de 1970, Franz Beckenbauer disputó la prórroga del encuentro entre Alemania e Italia con un brazo vendado. Esta historia, ejemplo de compromiso, amor por unos colores y fortaleza mental y física siempre ha acompañado al mito alemán, pero Ashley Williams ha querido emular al legendario futbolista y ha disputado los últimos minutos del encuentro entre Gales e Irlanda del Norte sin protección alguna pero con evidentes muestras de dolor que le impedían mover su brazo.
El choque entre Jonathan y Ashley Williams se produjo en el minuto 87, ya con Gales por delante en el marcador. Chris Coleman se dispuso a sustituir al central del Swansea City, pero éste se negó y decidió continuar jugando intentando, en la medida de lo posible no mover su brazo.