El francés Antoine Griezmann, autor de los dos goles que ayer le dieron la remontada a Francia frente a Irlanda, reconoció este lunes que los "Bleus" arrancan con dificultades los partidos y aseguró que el equipo intentará corregirlo porque "no es bueno para el corazón de todos los franceses".
"Es cierto que nuestros primeros minutos en cada partido son malos o muy malos. Hay que mejorar eso (...) porque no puede pasar en cada encuentro", comentó Griezmann, que suma ya tres goles en el campeonato y ayer resucitó a Francia, que había encajado contra Irlanda el segundo gol más rápido de la historia de la Eurocopa.
El delantero del Atlético de Madrid, de 25 años, señaló que a medida que avanzan los partidos de Francia, acostumbrada a resolver en la segunda mitad o en el último suspiro de los partidos, la defensa está más cansada" y los de Didier Deschamps tienen más fácil encontrar portería, también porque "los jugadores que entran (desde el banquillo) nos ayudan mucho".
"No es bueno para el corazón de todos los franceses", bromeó el jugador, que prometió que los "Bleus" se esforzarán por "hacer mejores primeras partes".
Griezmann, al que ahora apuntan todos los focos que rodean a la selección francesa, confesó que en el descanso, con 0-1 abajo, hablaron entre ellos para motivarse de cara a la segunda mitad contra Irlanda.
"Nos dijimos que había que mover el culo, que somos la selección de Francia y que si nos eliminaban por ese resultado íbamos a quedar como gilipollas (sic)", resumió el goleador francés.
En una extensa conferencia de prensa, Griezmann asumió su liderazgo de cara portería, pero quiso compartir su protagonismo con "los jugadores de los que no se habla tanto pero que ayudan al equipo", con mención especial al delantero Olivier Giroud, cuyo trabajo sirve para "cansar a la defensa".
"Intento apoyarme en eso (...), intento llevar al equipo lo más lejos posible"", agregó el rojiblanco.
"Sea aquí o en España, siempre digo lo mismo. Es el grupo. Si sobre el terreno puedo ser decisivo, tanto mejor. Pero con un solo jugador no se llega muy lejos, es el colectivo", agregó el francés, cuyo próximo rival saldrá del duelo de esta noche en Niza entre Inglaterra e Islandia a las 21.00 hora local (19.00 GMT).
Griezmann consideró beneficioso para los franceses tener, de nuevo, una semana de descanso entre partido y partido, antes de disputar los cuartos de final el próximo domingo en el Estadio de Francia de Saint-Denis, al norte de París.
"Está bien, para prepararse, para darse masajes. Permite descansar, tomarse tiempo y preparar bien el partido", dijo.
Preguntado si sería un fracaso que Francia, anfitriona del torneo, cayera en los cuartos el jugador se mostró claro:
"Seguro, sería falso decir que no. Tenemos equipo para llegar hasta el final", concluyó.