Todos daban por clasificada a cuartos a Francia con el 3-1 en el marcador. Primero, apareció Haris Seferovic para meter presión a los de Didier Deschamps en los minutos finales. Y cuando solo quedaba el último suspiro del partido, Xhaka filtró un pase a Mario Gavranovic para que marcase el gol del empate de Suiza. Un tanto que provoca la tercera prórroga de los octavos de final de la Eurocopa, tras la del Italia-Austria y la del Croacia-España.