Tras 120 minutos de puro nervio, una tanda de penaltis que pasará a la historia. España conseguía el pase a la semifinal de la Eurocopa tras eliminar a Suiza desde los once metros. Unos minutos en los que la selección española de Luis Enrique demostró estar completamente unida. Y tras el gol de Mikel Oyarzabal, la explosión de alegría.