La mala suerte se ceba con España: gol en propia de Le Normand cuando Georgia llevaba un 13% de posesión

El partido de octavos de la Selección Española ha empezado según el guion previsto por Georgia. El equipo dirigido por Willy Sagnol no ha dudado en otorgar todo el dominio de la posesión a nuestro combinado desde el primer instante de juego. Los contragolpes son su principal arma y en el minuto 18 ha llegado la guinda a su estrategia.

Sin apenas haber tocado el balón, Georgia se cerraba en su propio área durante el primer cuarto de hora de juego. España movía el balón de un lado a otro buscando el hueco en la defensa georgiana. Con cifras superiores al 87% y 6 córneres en apenas 16 minutos, la Selección Española se las prometía muy felices en Colonia.

Pero llegó el 18', los de Luis de la Fuente dejaron espacios a sus rivales y no desaprovecharon la oportunidad. Corrió el conjunto georgiano, controló Kakabadze en la banda derecha y puso un centro con la principal estrella del equipo, Kvaratskhelia, como destinatario. El esférico golpeó en el cuerpo de Robin Le Normand, que sin intención introducía el cuero en la portería defendida por Unai Simón.

Una jugada que demuestra lo que importa en el fútbol: con 13% de posesión del balón, pero con una idea clara y ejecutada a la perfección.

😰 La primera en la frente.

Georgia se adelanta con el gol de Le Normand en propia puerta. #Euro2024

Después de un inicio arrollador de España, la primera vez que los georgianos se asoman al área consiguen el tanto. #Euro2024

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— Teledeporte (@teledeporte) June 30, 2024

España comenzó a precipitarse tras el gol de Georgia

Georgia se adelantaba y su plan de inicio se cumplía a la perfección. 1-0 y a continuar con la férrea defensa muy cerca del arco de Mamardashvili, que ya ha dejado pruebas de su calidad bajo los palos en los primeros minutos.

Tras el gol, la desesperación comenzó a apoderarse de los futbolistas de La Roja. Las jugadas de combinación al primer toque se esfumaron y comenzaron a verse muestras de la precipitación que se apoderó de nuestros hombres. Con más de 70 minutos por delante, el partido no comenzaba de la mejor manera.

Prácticamente los 11 hombres georgianos se situaron por detrás del balón, aunque aún yendo por delante en el electrónico no renunciaron a buscar las contras cuando tenían la ocasión.