Marcelino García Toral dirigió ante el Panathinaikos su segundo partido en La Cerámica - tras la victoria ante Osasuna del pasado fin de semana - en su vuelta al Villarreal. El técnico asturiano dejó una imagen curiosa en los primeros minutos del partido de la Europa League.
Las cámaras de ElDesmarque siguieron a Marcelino desde los primeros compases del encuentro. El técnico asturiano se mimetizó en el banquillo con el resto de sus jugadores. Casi escondido en la esquina del banquillo, el ex del Marsella tardó más de 10 minutos en pisar por primera vez el verde de su área técnica, como si un sentimiento de pudor le hubiese invadido.
No fue hasta el minuto 11 cuando Marcelino abandonó el banquillo por primera vez para dar unas órdenes a sus jugadores tras una jugada que no le gustó demasiado. Pero pocos segundos después, el asturiano regresó al banquillo para 'resguardarse' de las miradas de La Cerámica.
“Vengo a un club con tres entrenadores. No es lo habitual y ahora debemos recuperar la normalidad y rehacernos lo antes posible”, comentó el técnico, quien admitió que su conocimiento del rival, al que ya se enfrentó en agosto como entrenador del Marsella en la fase previa de la Liga de Campeones, puede “ayudar” a su planteamiento, si bien precisó que ambas plantillas no son comparables.
“Tenemos idea de juego diferente. A la hora de contrarrestar su juego, sí que los conocemos y sabemos cómo juegan y dónde nos pueden generar problemas y nosotros a ellos”, precisó Marcelino, quien negó tener un sentimiento de revancha con el equipo heleno tras haber quedado apeado de la Liga de Campeones.