El grupo extremista de Daesh ha castigado a tres jóvenes iraquíes a treinta latigazos por llevar puesta la camiseta del jugador del Fútbol Club Barcelona, Leo Messi.
Al parecer, la policía de este grupo islamista arrestó a los tres jóvenes mientras jugaban a fútbol, rompiendo la camiseta del astro argentino que portaba uno de los jóvenes. Posteriormente, procedieron a trasladarlos al centro de la ciudad de Mosul, donde los jóvenes recibieron el severo correctivo por parte de los extremistas, según informó la agencia local Al-Sumaria.
Desde el Daesh, consideran que el castigo se debe a que "el fútbol es un deporte prohibido por las enseñanzas del Islam".