La RFEF ha confirmado este domingo que la Supercopa de España que enfrenta al Barcelona con el Sevilla se disputará a partido único el próximo 12 de agosto en Tánger. Sin embargo, en la capital del norte de Marruecos ya llevaban trabajando varios días para acoger este evento que servirá de promoción para la ciudad y el país.
Desde que se especuló con la posibilidad de que la Supercopa se disputase por primera vez fuera de España, se desató la euforia entre los millares de aficionados que existen en Marruecos por el fútbol español, sobre todo por el conjunto azulgrana.
Todavía por conocer los precios de las entradas, que rondarán a los 40 euros las más baratas, parece que ello no será un impedimento para ver unas gradas bastante pobladas, a lo que habrá que sumar todos los aficionados que decidan desplazarse desde la península para seguir a sus respectivos equipos.
Se espera que cada club disponga de en torno a 6.000 entradas, mientras que el transporte y hospedaje de ambas escuadras serán cubiertos por la organización.
Esta será la tercera Supercopa europea que se celebre en Tánger en la última década, ya que ha acogido en dos ocasiones la edición francesa, en 2011 con el partido que enfrentó al Olympique de Marsella contra Lille, y en 2017, donde el Paris Saint-Germain se midió al Monaco.
Para el Barcelona, Tánger no es tierra desconocida. En julio del 2012, el conjunto azulgrana se impuso al Raja de Casablanca por un contundente 8-0 en un amistoso disputado en el mismo recinto, donde brillaron con un doblete de Alexis Sánchez y, como no, Leo Messi con un 'hat-trick'.