El Barcelona continúa preparándose para la profunda remodelación de la plantilla que el club acometerá este verano. Ya con Frenkie de Jong firmado, el club trabaja en futuras incorporaciones que refuercen al equipo, pero para ello, serán algunos los jugadores que tendrán que salir para que el club recaude el suficiente músculo económico.
Jugadores como Kevin Prince Boateng, Jeison Murillo, Thomas Vermaelen, Jasper Cillessen, André Gomes, Denis Suárez o Rafinha no continuarán, a buen seguro, en el club, pero sus salidas no generarían los suficientes ingresos como para acometer importantes operaciones.
Por ello, según informa el diario Marca, el club se plantea las ventas de dos jugadores importantes como Philippe Coutinho y Ousmane Dembélé. La salida de uno de ellos descartaría la del otro. Sobre la marcha del brasileño ya se había especulado dado su pobre e irregular rendimiento, pero Dembélé es un futbolista con mayor margen de progresión y cuyas lesiones acompañadas de algunos problemas de disciplina le han impedido brillar como se esperaba y por todo ello podría ser pretendido por muchos clubes importantes.
Por rendimiento y relación con la afición, en el club están más convencidos de la marcha de Coutinho, y la venta de Dembélé, según apunta el mismo medio, sólo se activaría en caso de que no fuera posible encontrar equipo al ex del Liverpool.