El Juzgado de Primera Instancia número 34 de Barcelona dio la razón al empresario Agustí Benedito, impulsor en 2017 del voto de censura contra la directiva del Barcelona, cuyo calendario impugnó a la justicia al considerar que requería de más días para recoger los apoyos.
Tras el proceso de voto de censura, el excandidato a las elecciones interpuso una demanda ordinaria contra el club por considerar que privaba a los socios de sumarse al voto de censura hasta el 2 de octubre, fecha que los promotores consideraban que era la válida para finalizar la recogida de apoyos, y no el 27 de septiembre, como estableció el Barcelona.
Durante el periodo del voto de censura, el club estableció las 23:30 horas del día 27 como plazo límite de entrega de los apoyos, pero el socio promotor consideró que la fecha debía ser el 2 de octubre, ya que interpretaba que los sábados eran días inhábiles, posición contraria que defendió el club, recordando que en los anteriores votos de censura y elecciones en el club, los sábados se habían considerado días hábiles.
La sentencia del juzgado de primera instancia, que no es firme, declara "nulo" el pleno del 13 de septiembre de septiembre de 2017 de la Junta Directiva que determinó como días hábiles los sábados para recoger firmas.
"El acuerdo de la junta Directiva del FC Barcelona del 13 de septiembre de 2017 fue totalmente discrecional, con el efecto de reducir las posibilidades de éxito del voto de censura promovido por el demandante al acortar el plazo para obtener los apoyos necesarios del resto de socios", concluye en su escrito.
Asimismo, la jueza puntualiza que "la Junta Directiva, ante la ausencia de regulación en los estatutos, tenía el deber de adoptar la solución menos dañosa para los socios del Barcelona, y facilitar en la medida de lo razonable la libre y real participación de los socios en el funcionamiento del club".
La resolución judicial no es firme y la entidad azulgrana tiene ahora un plazo de veinte días para recurrir la sentencia.
Durante el proceso, Benedito reunió 12.504 apoyos, lejos de los 16.570 que necesitaba para promover un referendo para que se votase la continuidad de la junta de Josep Maria Bartomeu al frente del club.
"Nos quedaba un partido (Barcelona-Las Palmas) y, es por esa razón, que la junta de Bartomeu se pasó por el forro de la camisa nuestros derechos y tiró adelante con su calendario", lamentó Benedito en la comparecencia para valorar la sentencia.
El excandidato, que durante su intervención se mostró muy crítico con la gestión de la actual junta directiva, celebró las conclusiones de la sentencia, si bien aseguró que esta resolución no le da fuerzas para activar otro voto de censura cuando faltan menos de dos años para que se celebren los comicios presidenciales.
"El voto de censura quedó finiquitado en el momento que la junta dijo que se acababa el plazo. En cualquier caso, el que tenga las ganas de volver a montar un voto de censura yo lo apoyaré. Ahora queda absolutamente claro qué tipo de talante y qué personajes tenemos dirigiendo el FCB en relación a la democracia participativa. Han ganado dos años y les queda un año y medio. Más no van a durar", aseveró.