El FC Barcelona tiene pensado acometer una profunda remodelación de su actual plantilla de cara a la próxima temporada. El conjunto azulgrana no está rindiendo esta campaña al nivel que se esperaba y prueba de ello fue el cambio de entrenador que se produjo durante el mes de enero. El Barça tendrá un verano movido aunque el miembro clave de la actual plantilla ya ha dejado claro con qué compañeros quiere contar a su lado.
Se trata de Messi, que ha sentado las bases de lo que será el Barça del futuro. El argentino es consciente de que serán muchas las cosas que se muevan en el club en verano y que la directiva tendrá que recaudar mucho dinero a través de ventas. Es consciente de que muchos de sus compañeros abandonarán el Camp Nou, pero son otros varios los que, en su opinión, deberían permanecer.
Son los casos de los siguientes jugadores: Luis Suárez, Busquets, Piqué, De Jong y Jordi Alba.
Salvo en el caso del centrocampista holandés, los otros cuatro jugadores son hombres de veteranía y liderazgo dentro del vestuario, futbolistas ya con trayectoria en el club.
El caso de Frenkie de Jong es entendible por varios aspectos. Por un lado, el Barça invirtió mucho dinero en el fichaje del ex del Ajax el pasado verano. Tras sobresalir durante la pasada campaña con el cuadro de Ámsterdam, el conjunto azulgrana se aseguró sus servicios antes de que concluyera la temporada por un precio fijo de 75 millones de euros.
Por otro lado se encuentra el rendimiento del futbolista, que está adaptándose bien al nuevo club y que tiene el tan deseado ADN Barça.
Con esas, la continuidad del resto de futbolistas parece estar en el aire aunque hay otras piezas que parece poco probable, por distintas circunstancias, que salgan.