La eliminatoria entre FC Barcelona y PSG de octavos de UEFA Champions League tiene alicientes por cualquier sitio que se mire. La vuelta de Neymar al Camp Nou, los cantos de sirena a Leo Messi desde París, el 6-1 de hace unos años, el sentimiento espanyolista de Pochettino... y, por si fuera poco, también podría tener minutos en esos partidos un joven que fue la gran promesa de la Masía como Xavi Simons.
El centrocampista neerlandés fue la gran esperanza de la cantera barcelonista desde que llegara al club con sólo siete años. Desde ahí fue ascendiendo de categoría y dejando destellos en todos los torneos en los que se presentaba pero, como Neymar y como el PSG desea con Messi, fue reclutado desde París.
El conjunto galo se lo arrebató al Barcelona en julio de 2019 después de no llegar a un acuerdo para su renovación en el conjunto catalán. En el PSG le ofrecieron un millón de euros al año a Xavi Simons a sus 16 años, suficientes para convencerle de hacer las maletas a la capital francesa.
También allí ha ido quemando etapas en las categorías inferiores hasta su debut profesional, que se produjo el pasado miércoles en la victoria ante el Caen en la Copa de Francia. A pesar de su confianza en él, Mauricio Pochettino, su actual entrenador, no quiere que se confíe y deje de trabajar.
"No será Iniesta ni Xavi, pero tiene calidad y desequilibrio para poder desarrollar una carrera en el fútbol de primer nivel. Todavía es muy joven, pero tiene muy buen potencial. El hecho de debutar es un cúmulo de muchas circunstancias porque muchos jugadores tenían que descansar", declaró el entrenador argentino en los micrófonos de El Transistor.
Unas palabras que le pueden servir a Simons para no dormirse en los laureles mientras espera que llegue ese ansiado duelo entre Barcelona y PSG con el morbo asegurado.