Tensión en Cornellá. El RCD Espanyol y el FC Barcelona han disputado un derbi de alto voltaje que ha acabado con un expulsado en cada equipo. El equipo de Vicente Moreno ya acariciaba el triunfo cuando Luuk de Jong silenció el RCDE Stadium casi en la última jugada del partido, en el minuto 96. Para entonces, los dos equipos se habían quedado ya con un jugador menos por sendas expulsiones.
Los protagonistas en cuestión han sido Gerard Piqué y Nico Melamed. Un culé de cuna, un perico de cuna. El central del Barça ya tenía amarilla de antes y vio la segunda en esa acción. El centrocampista perico, dos tarjetas de manera casi consecutiva. El caso es que los dos acabaron en la calle antes de tiempo.
La jugada sucedió ya en el tramo final del encuentro, a los 92 minutos y en el tiempo añadido. Piqué sacó la pelota jugada desde el córner. Melamed se chocó con él con fuerza allí, cerca del córner, pero la jugada siguió. Posteriormente, Piqué le soltó una colleja por detrás, algo que evidentemente no gustó nada al jugador del Espanyol, que le pegó un empujón como respuesta.
El colegiado vio la reacción perfectamente y sacó una amarilla a Melamed, pero no a Piqué en primera instancia. El caso es que la tensión se mantuvo y los dos futbolistas se encararon, frente con frente. Fue entonces cuando el árbitro, que lo estaba viendo todo en primer plano, enseñó la segunda amarilla a Piqué y la roja y, unos segundos después, la segunda amarilla a Malemad y su consiguiente roja. Los dos acabaron en la calle en ese tramo final.
🟥 92' | Expulsados @3gerardpique y Melamed (2-1) #EspanyolBarça
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) February 13, 2022