La polémica con Ousmane Dembélé en el FC Barcelona se resolvió después de que el francés volviera a los planes de Xavi Hernández. A pesar de la intención inicial de Joan Laporta de que no volviera a jugar si no renovaba, el técnico finalmente le incluyó en las dos últimas convocatorias, volviendo a jugar en el derbi de la ciudad condal ante el Espanyol.
Sorprendió que, después de entrar en la lista ante el Atlético de Madrid en el Camp Nou, no tuviera minutos. Sí jugó en el partido ante el Espanyol dejándonos sin conocer la reacción de la afición azulgrana ante su presencia sobre el terreno de juego, pese a que sonasen silbidos al anunciar su nombre por megafonía en la previa.
En la rueda de prensa previa al partido de Europa League, Xavi Hernández descartó que el hecho de no jugar en casa y sí fuera se tratase de una estrategia para proteger al jugador: "No cambia si jugamos fuera o dentro. Dependerá de cómo entrena, de la competencia. Estoy seguro de que ayudará. Contra el Espanyol tuvo buenos minutos, dando profundidad y llegando arriba. Nos ayudará de aquí a final de temporada. Es uno más".
Ante la acumulación de futbolistas ofensivos en el Barcelona tras un mercado en el que han llegado Ferran Torres, Aubameyang o Adama Traoré, Dembélé deberá pelear duro por recuperar su puesto. Precisamente este último ha sido el titular en la banda derecha durante los dos últimos encuentros, llevándose los elogios de Xavi.
Contra el Nápoles, este jueves en UEFA Europa League, llegará una nueva oportunidad de conocer la opinión de la parroquia del Camp Nou sobre el futbolista francés. Ahí se sabrá si los silbidos al anunciarse su nombre frente al Atlético fueron algo puntual y los culés quieren pasar página o si se trata de un castigo permanente que sólo se podría resolver con exhibiciones sobre el campo.