Con el triunfo ante el Elche (1-2), el FC Barcelona logró por primera vez este curso tres triunfos seguidos en LaLiga Santander y cuatro consecutivos entre todas las competiciones con Xavi Hernández, hallando una regularidad perdida el resto de la temporada que le llevó a quedar eliminado de la UEFA Champions League y a alejarse mucho de los primeros puestos de la Liga.
Por otro lado, el conjunto de Xavi Hernández no conoce la derrota en el tiempo reglamentario (cayó en la prórroga ante el Real Madrid en la Supercopa de España y ante el Athletic Club en la Copa del Rey) desde el 4 de diciembre de 2021, cuando perdió por 0-1 ante el Betis en Liga en el Camp Nou.
Desde entonces, ha sumado en la competición doméstica 25 de 33 puntos posibles, lo que le ha permitido regresar a la zona de Liga de Campeones y hasta situarse tercero este fin de semana, aprovechando la derrota del Betis ante el Atlético de Madrid (1-3). Además, ha disputado un partido menos que sus rivales, el que jugará el 24 de abril ante el Rayo Vallecano en el Camp Nou.
Antes de vencer al Valencia (1-4), al Athletic Club (4-0) y al Elche (1-2), la otra mejor racha del Barça en Liga eran dos triunfos consecutivos, algo que tan solo había conseguido en dos ocasiones. En noviembre cuando venció al Espanyol (1-0) y al Villarreal (1-3), y entre finales de enero y principios de febrero, cuando derrotó al Alavés (0-1) y al Atlético de Madrid (4-2).
Gran parte de culpa de esta mejora azulgrana, más allá de la cocción de los conceptos tácticos de Xavi Hernández, la tienen los cuatro fichajes del mercado de invierno: Dani Alves, Ferran Torres, Adama Traoré y Pierre-Emerick Aubameyang. Estos jugadores han aportado soluciones al técnico azulgrana, que en sus primeras semanas en el cargo prácticamente no tuvo dónde elegir.
Y con ellos, sobre todo gracias a los tres delanteros, el Barça se ha reencontrado con una gran capacidad goleadora de la que careció en la primera mitad de la temporada y que le penalizó muchísimo. Desde que Ferran, Adama y Aubameyang están en el equipo, el conjunto azulgrana ha duplicado su media de goles por partido.
En los siete encuentros que llevan entre todas las competiciones, el equipo ha marcado 21 goles, lo que da una media de tres por encuentro. En cambio, en el resto de la temporada el Barça tan solo anotó 41 goles en 30 partidos, una media de 1,37 por encuentro.
Pero estas buenas noticias en clave azulgrana probablemente llegan demasiado tarde como para pensar que el título de Liga aún es posible. A falta de 11 jornadas para el final (aunque el Barça tiene un partido menos), el líder, el Real Madrid, le saca 15 puntos al equipo de Xavi Hernández.
Esto comporta que, suponiendo que el Barça ganase los 12 encuentros que le quedan por disputar, incluido el clásico en el Santiago Bernabéu del 20 de marzo, el Real Madrid debería dejarse nueve puntos más siempre que el conjunto catalán lograra llevarse el 'goal average' particular (en el Camp Nou vencieron los blancos por 1-2).
A priori, los duelos más complicados que les quedan a los de Xavi Hernández son ante el Real Madrid, la Real Sociedad y el Betis a domicilio, y ante el Sevilla y el Villarreal en casa. Por su parte, dejando de lado el 'clásico', al conjunto de Carlo Ancelotti le quedan las duras pruebas del Sevilla y el Atlético de Madrid fuera de casa y el Betis en el Santiago Bernabéu.
En cambio, en la Liga Europa el Barça mantiene todas las opciones de título y es uno de los grandes favoritos para levantarla el 18 de mayo en el Sánchez Pizjuán. Este jueves, los de Xavi Hernández jugarán la ida de los octavos de final ante el Galatasaray en el Camp Nou.